El recién declarado coautor de la muerte de Rocío Wanninkhof, Tony King, vio ayer confirmada su condena a 36 años por el asesinato de la joven de Coín Sonia Carabantes. El británico había presentado un recurso ante el Alto Tribunal. Como King mató en 1999 a Wanninkhof y en 2003 a Carabantes, la familia de la joven de Coín pedirá 600.000 euros al Estado por la falta de coordinación entre Policía y Guardia Civil durante esos años. Expertos juristas afirman que el veredicto del caso Wanninkhof deja la puerta abierta para un segundo juicio si hubiera nuevos sospechosos.