Luna, Linda, Laika, Rocky y Toby, los nombres de perros más comunes de España

Luna, la perrita de Raquel.
Luna, la perrita de Raquel.
RAQUEL ESPINOSA
Luna, la perrita de Raquel.

Cuando aquella perrita de menos de tres meses llegó al que sería su hogar ya estaba decidido que Nika era el nombre elegido para ella. Nacida en Menorca, esta mestiza había sido adoptada por una pareja madrileña y para poder hacer el viaje de una hora de avión había tenido que pasar por el veterinario para obtener el pasaporte. En él, además de constar que estaba en buen estado y podía desplazarse a su destino, debía figurar su nombre, así que su nueva familia ya había mantenido el debate pertinente sobre cómo se llamaría. ¿Quina? No. ¿Sira? Tampoco. ¿Naki? Uuumm… ¿Nika? ¡Perfecto!

Hay quien intenta ser original, quien busca un nombre que haga referencia a alguna de las características del físico o del carácter del can o quien recurre a algún personaje de ficción.

Carol y Diego están entre los centenares de lectores que han participado en el Día del Perro sin Raza enviando a 20Minutos la foto de su mascota. Ellos por ejemplo han optado por una mezcla de las dos últimas posibilidades y le han puesto Super Ratón: "Rebautizada así porque tiene una energía inagotable, come por tres, es olímpica o ninja, según la ocasión, y tiene mucha personalidad".

Existen algunos consejos para la elección, como que la palabra esté formada por un máximo de dos sílabas para que el animal la entienda mejor. También conviene tener en cuenta que es probable que se utilice a voz en grito en plena calle para conseguir que haga caso. Pero al final depende del gusto de cada propietario.

Son bastantes los que optan por protagonistas de películas, series o dibujos animados. Los dos "soles" de Luis se llaman Frodo y Gandalf; Janina es la dueña de los hermanos Zipi y Zape y "el rey indiscutible de la casa" de Ana María es el pequeño Sheldon Cooper.  Juanito, Nala, Artz, Rumba, Nymeria, Trixi, Okupa, Boli, Trufita o conceptos tan optimistas como Suerte y Happy son algunos otros nombres elegidos por los participantes en la iniciativa de este diario.

Raquel y su inseparable Luna

Entre quienes se han sumado se encuentra también Raquel Espinosa. Su perra se llama Luna y es una mezcla de setter gordon y cocker. Llegó a su vida hace 12 años. "Se la cogí a una señora que regalaba los cachorros porque no podía mantenerlos", cuenta esta joven de 30 años y relata que el bautizo fue fruto de un debate familiar. Ella pidió consejo y su cuñada fue la más insistente: tenía que ser Luna. "Yo quería que se llamara Jackie, por la serie de dibujos animados Jackie y Nuca que veía cuando era pequeña", recuerda. La perra es completamente negra y no creía que Luna fuese adecuado.

Ahora cree que fue una buena decisión: "Es un nombre dulce y ella es muy buena". También tiene la ventaja de ser fácil de pronunciar. "De las cuatro palabras que dice mi sobrino de dos años, una es Luna. El nombre de su tía aún no lo pronuncia pero el de ella sí", afirma divertida.

Reconoce no obstante que le hubiese gustado optar por algo más original. Cada vez que salen a pasear se encuentran al menos con una tocaya. No en vano, Luna encabeza el Top10 de nombres más comunes entre los perros, un ranking elaborado a partir de la información que consta en los registros de diferentes administraciones autonómicas y colegios de veterinarios. La Red Española de Identificación de Animales de Compañía (REIAC) señala que en España hay registrados nueve millones de perros, pero es complicado tener el dato de cuántos de ellos son mestizos. Cada comunidad adaptó los archivos en función de su ley autonómica y no en todas se hace esa distinción.

Esos registros autonómicos muestran que los mestizos son la raza de perro más común. En base a los datos que ha podido recabar este diario, Canarias es la región con el porcentaje más elevado. Casi el 40% de los 482.613 perros registrados no tiene raza. Le siguen la Comunidad Valenciana, con el 34,7% (302.334); Madrid, con el 33,5% (335.313) y Cataluña, con el 32,8% (cerca de 296.000). En el otro extremo se sitúan Aragón, Navarra y Castilla-La Mancha, con el 14,6 (40.370), el 16 (13.229) y el 19% (30.257), respectivamente.

Andalucía, con 1.857.167, es la comunidad con más perros inscritos, de los cuales el 27% no tiene raza. En Cantabria el porcentaje es del 30,4% (24.157); en Asturias, del 21,1% (29.197); en el País Vasco, del 20,6% (56.180), y en Galicia, del 19,2% (61.716).

Así, si estas doce comunidades suman 6,4 millones de canes registrados, en torno al 30% son mestizos.

Diferencias autonómicas, pero no tantas

Tampoco todas tienen la posibilidad de filtrar el registro por nombres pero con los datos de las que lo han hecho en la mano no se aprecian grandes diferencias entre ellas.

Recurrir a perros famosos, ya sean reales o de ficción, es otra práctica habitual: Goofy, Rex, Laika,… La triste historia de la perrita que fue enviada al espacio por la URSS en 1957, convirtiéndose en el primer ser vivo terrestre en orbitar la Tierra, ha inspirado a muchos. Solo sobrevivió entre cinco y siete horas pero se hizo mundialmente conocida. A día de hoy, más de medio siglo después, Laika es otro de los nombSuper Ratón es puro nervio.res más comunes entre los mestizos.

Junto a Luna y Laika, el Top10 nacional lo completarían Linda, Rocky, Toby, Chispa, Kira, Lola, Canela y Chiqui.

Luna y Linda lideran casi todas las listas regionales. Así es en Andalucía, Castilla-La Mancha, Navarra, Canarias, Comunidad Valenciana y Madrid. En el País Vasco se encuentran en tercera y octava posición, en una lista que comienza con Txiki y Lagun, y en Asturias, Luna es la opción más habitual, pero seguida de Toby. Linda se sitúa en décimo lugar.

Los ranking vasco y navarro son los que más peculiaridades presentan respecto al resto, con nombres como Beltza, Zuri, Bizkor, Argi o Neska. Pero también los demás tienen sus singularidades. En Andalucía no es extraño encontrar Rubias, Caretas, Palomas o Tinas. Entre los canarios, un nombre bastante usual es Niã. Lo mismo ocurre con Zar en Asturias, Lluna en la Comunidad Valenciana o Cuqui en Madrid y Castilla-La Mancha.

Es obligatorio identificar al animal

Estos datos son muy representativos pero no totalmente fidedignos porque, pese a que en todas las comunidades es obligatorio que el animal esté identificado, todavía hay perros que carecen de microchip. La sociedad cada vez está más concienciada, pero aún queda trabajo por hacer.

La mayoría de los canes que llegan a las protectoras están sin identificar. Es el caso de los animales que recibe El Refugio, en Madrid. Por ello, esta asociación celebró el domingo una concentración en la Puerta del Sol para demandar duras sanciones a las personas que tengan animales en esa situación. "El microchip nos permite poner un cerco más a los maltratadores y a la gente que comete abandonos", explica Nacho Paunero, presidente de El Refugio. Paunero añade que, de los que recogen sin chip, la mayoría son mestizos.

Ramón García, presidente del colegio oficial de veterinarios de las Islas Baleares, apunta que cuando alguien quiere una raza concreta la suele adquirir en centros especializados o criaderos profesionales, y que existen más probabilidades de que el animal cuente con chip. Las camadas no controladas, y por tanto la no identificación, suelen ser más habituales en el caso de los mestizos. Matiza no obstante que es un tema que va asociado a la responsabilidad y sensibilidad del propietario. "Quien no tiene compromiso con el perro y no le coge cariño no lo hace ni siendo mestizo ni siendo de raza", coincide Armando Solís, presidente de la REIAC y del colegio oficial de veterinarios del Principado de Asturias.

Otro asunto que puede desvirtuar las bases de datos es que no se dé de baja al animal cuando fallece. El presidente de la REIAC recuerda que es un trámite gratuito y que es importante hacerlo para poder mantener los archivos actualizados. Aquellos canes que exceden de cierta edad y siguen en los registros suelen ser dados de baja automáticamente pero Solís señala que el margen es muy amplio.

Con el tiempo y las diferentes campañas se espera que esos archivos acaben siendo un fiel reflejo de la realidad y, tal vez, en breve, muestren nuevas tendencias a la hora de elegir los nombres de las mascotas. Ya hay quien ha bautizado a su fiel amigo con nombres como Google, Píxel o Drupal. ¿Será la tecnología, cada vez más, una nueva fuente de nombres perrunos?

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