Soraya Rodríguez, portavoz del PSOE en el Congreso, ha acusado al Gobierno de ser un Ejecutivo "aislado" que no escucha "ni a la sociedad, ni a la oposición, ni a su presidente de honor (por Aznar), ni a sus presidentes autonónimos, ni a sus ediles que se rebelan". "Menos suficiencia y pidan ustedes ayuda, que el país se les va de las manos", ha declarado Rodríguez.

La portavoz socialista ha realizado esas declaraciones en la sesión de control del Gobierno de este miércoles que, sin la presencia del presidente Mariano Rajoy, que se encuentra en el Consejo europeo de Bruselas, ha comenzado con un rifirrafe barriobajero entre las dos portavoces de Gobierno y oposición, en el que se han echado en cara diferentes tramas de corrupción.

Soraya Rodríguez acusó al Gobierno de "pedir sacrificios, mientras se afanan en justificar sus sobresueldos, obviando que el objetivo de la investigación judicial abierta" es precisamente esclarecer el "presunto origen ilegal del dinero que cobran", en referencia a las declaraciones ante el juez de distintos cargos del PP ante el juez Ruz por el 'caso Bárcenas'. "Con sus decisiones, ganan unos pocos, pero perdermos todos", concluyó su primera intervención.

La vicepresidenta, Soraya Saénz de Santamaría, respondió devolvió la referencia 'corrupta' a su rival. "Pide usted explicaciones a todos, así que me gustaría que diera explicaciones por la detención de tres altos cargos del PSOE en Extremadura", respondió Saénz de Santamaría refiriéndose a los tres detenidos por supuestas irregularidades cometidas en la Institución Ferial de Extremadura (Feval).  "Su interés general es el mismo que el de los EREs en Andalucía", ha contraatacado.

La socialista no recogió el guante y obvió las alusiones en su réplica. Fue su oportunidad para sacar a la palestra la polémica entrevista del expresidente del Gobierno y presidente de honor del PP, José María Aznar, en donde criticó a Rajoy y amagó con regresar a la política. "Es un Gobierno aislado, acorralado, que no escucha ni a la sociedad, ni a la oposición, ni a su presidente de honor, ni a sus presidentes autonónimos, ni a sus concejales", espetó la socialista que concluyó: "Menos suficiencia y pidan ustedes ayuda, que el país se les va de las manos".

Su tocaya decidió también obviar las referencias de su rival de bancada y siguió a lo suyo: "Este Gobierno se encontró un país en ruinas y de ahí vamos. Este Ejecutivo hace las reformas que ustedes no se atrevieron a acometer y piensa en los españoles no solo de hoy, sino también de mañana".

Más tarde, en los pasillos del Congreso, Sáenz de Santamaría aseguró que "respeta" las opiniones de Aznar y ha subrayado que lo que el Ejecutivo "agradece" son las "aportaciones" para que en España se vuelva a crear empleo.

"Respeto las opiniones de todos y cada uno", ha declarado la 'número dos' del Gobierno, para recordar que España vive "un momento muy difícil" y que el Ejecutivo de Rajoy "está trabajando" para sacar al país "adelante".

La portavoz socialista no ha perdido la oportunidad de ahondar en las palabras de Aznar en entrevista televisada de este martes en los pasillos de la cámara. La portavoz del PSOE  ha subrayado que su conclusión sobre la entrevista es la crítica "abierta y muy severa" al Gobierno de Mariano Rajoy. La sombra de las palabras del expresidente del Gobierno ha sido alargada este miércoles en la Cámara Baja.

En declaraciones a los medios en los pasillos del Congreso, Rodríguez ha opinado que si Aznar tiene intención de volver a la primera línea de la política "los ciudadanos españoles tendrían en el PP ahora dos grandes preocupaciones: el presidente del Gobierno y quien supuestamente intentaría sucederle".

Con todo, a su entender, lo más relevante de la intervención de Aznar, "erigiéndose en portavoz de un grupo muy numeroso de votantes del PP", es que hizo una crítica "abierta y muy severa" a un Gobierno que "está absolutamente aislado".

El Gobierno guarda silencio por el momento ante la posibilidad de que el expresidente José María Aznar vuelva a la política, aunque el portavoz económico del Grupo Popular, Vicente Martínez Pujalte, duda de esa posibilidad recordando que el expresidente decidió "dedicarse a otras cosas.