Los Mossos d'Esquadra iniciaron a las cuatro de la tarde del miércoles el desalojo de los okupas que se instalaron en el recinto fabril de Can Ricart después de que fueran desalojados de 'La Makabra' .

Decenas de furgones de la policía acordonaron la zona después de recibir la autorización del Juzgado de Instrucción número 27 de Barcelona que considera que los okupas han cometido un delito de "usurpación con violencia e intimidación".

Los okupas salieron en parejas escoltados por agentes que los introducen en los furgones para llevarlos a comisaría, tal y como había decretado el juez.

Los propietarios de Can Ricart pidieron el pasado lunes que actuara "lo más rápido posible" para desalojar "de inmediato" el antiguo recinto fabril.

En la orden, el juez señala que la ocupación de Can Ricart provocaba "temor y alarma social" entre los habitantes del Poblenou.

El alcalde, contento

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, se ha felicitado por el rápido desalojo de Can Ricart al considerar que "ciertas situaciones no convienen que se enquisten".

Hereu ha defendido la "legitmidad" de los propietarios de Can Ricart de "tener en su propiedad y bajo su control un bien que es suyo".

Mientras desalojaban a los okupas, los trabajadores de las diferentes naves que forman el recinto seguían desarrollando su actividad expectantes.