Unas setenta personas, aproximadamente, se han concentrado esta tarde a las puertas del Museo de Arte Contemporáneo (MARCO) de Vigo para pedir el indulto total para el extoxicómano David Reboredo, quien según su padre, Edmundo, no es "un ciudadano completo" al estar en un régimen de semilibertad.

Edmundo Reboredo ha declarado a los medios que su hijo "no es un hombre libre" ni tiene "la condición de ciudadano" en la literalidad del término, porque "sale cuando le dejan salir" del centro de inclusión social Carmen Avendaño y "va a donde le mandan", y solo dos veces al mes va a comer y cenar a casa los fines de semana.

Sobre la situación en que se encuentra la tramitación del segundo indulto, el correspondiente a la primera de las penas que le impusieron por intercambiar papelinas, su padre ha dicho que no disponen de información que les haga pensar que está próxima su concesión.

Ha explicado que el Ministerio de Justicia está a expensas de que el Tribunal Supremo emita un informe y ha subrayado que, por lo general, es "mucho más lento" que el tribunal sentenciador de Vigo, que tardó "casi tres meses" en hacer lo propio antes de que el Consejo de Ministros le concediera a su hijo el indulto parcial en marzo.

Edmundo Reboredo ha avanzado que intentarán contactar con la comisión de comunicación del Ministerio de Justicia para ver "si pueden apurar un poco" con los trámites, aun siendo consciente de que "no puede hacer nada" hasta disponer del informe del Supremo al tratarse de "un trámite legal".

David Reboredo cumple una de las dos condenas por intercambio de papelinas por las que ingresó en la cárcel el pasado mes de diciembre, aunque desde marzo lo hace en el CIS Carmen Avendaño tras ser indultado parcialmente.