El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha reiterado en la segunda declaración por escrito remitida a la Audiencia Nacional que su departamento no tomó ninguna decisión -ni de aprobación ni de rechazo- sobre el plan de viabilidad de Bankia en los días previos a la dimisión de Rodrigo Rato.

De Guindos, a quien el juez Fernando Andreu instó el pasado día 10 a aclarar algunas de las manifestaciones hechas en su primera declaración, precisa que el único documento del que tuvo conocimiento Economía fue un borrador que Bankia envió al Banco de España el 4 de mayo de 2012, y que desde ese momento hasta tres días después, cuando Rato dimitió, no se tomó ninguna decisión sobre él.

"Entre el 4 y el 7 de mayo, ningún representante del Ministerio de Economía y Competitividad tomó decisión alguna, ni de tipo administrativo ni de ninguna otra índole, en relación con dicho documento", señala en el escrito recibido por la Audiencia Nacional. Andreu solicitó a De Guindos, a instancias de UPyD, que aclarara si pidió un nuevo plan de capitalización a Rato a pesar de tener uno aprobado por el Banco de España el 17 de abril, si hubo reuniones previas de su departamento con Bankia para discutirlo y si tuvo constancia de borradores del mismo.

De Guindos dice que en las semanas previas al 4 de mayo hubo varios contactos entre el subsecretario del Ministerio, Miguel Temboury; y el director general de Política Económica, Antonio Carrascosa; con el consejero delegado de Bankia, Francisco Verdú; el director general adjunto del Gabinete de Presidencia, Luis Maldonado, y el secretario del Consejo, Miguel Crespo.

En "un buen número" de esos encuentros, "tanto telefónicos como presenciales", participaron representantes del Banco de España, afirma el ministro, que añade que sus colaboradores le han informado de que "en ninguno de dichos contactos se adelantó borrador del documento presentado por primera vez el 4 de mayo".

Según el titular de Economía, en su departamento únicamente se recibieron dos notas enviadas por Maldonado a Carrascosa, una del 3 de abril en la que se comparaba la estructura de puestos directivos de Bankia y CaixaBank y otra del 29 de ese mismo mes referida a los saneamientos, capitalización, nivel de cobertura y resultados de la entidad presidida por Rato.

"Mis colaboradores no tienen constancia de documentos adicionales resultado de dichos contactos con BFA-Bankia", agrega. Durante ese mes de abril, el ministro puntualiza que Rato le visitó "en solitario en tres ocasiones" en las que le presentó diversas operaciones de fusión y que incluso le llegó a comentar que una de ellas estaba prácticamente finalizada, aunque poco después le dijo que se había frustrado.