El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha confirmado este jueves que "va a investigar a fondo" el asunto del espionaje a políticos catalanes, sobre el que "hay mucha información".

Así lo dijo el titular de Interior en los pasillos del Congreso al ser preguntado por la posible existencia de una red que habría espiado y grabado ilegalmente conversaciones de distintos políticos en Cataluña, entre ellas la presidenta del PP en esa comunidad.

Jorge Fernández Díaz ha recordado que Sánchez-Camacho ha denunciado ante la Jefatura Superior de Policía de Barcelona y ha presentado una demanda civil en los Juzgados contra la agencia de detectives Método-3, por la supuesta grabación de una conversación que tuvo en 2010 mientras comía en un restaurante.

El ministro ha señalado que la Policía ya está trabajando y, preguntado por la posible existencia de más casos de espionaje a políticos, no ha querido dar más detalles de esa investigación policial y judicial.

"Evidentemente la Policía va a investigar una vez que se ha presentado esa denuncia y una vez que tiene conocimiento público de esos hechos para saber qué hay de cierto en ello", ha concluido.

La presidenta de los populares catalanes habría sido grabada mientras comía en el restaurante La Camarga con la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola María Victoria Álvarez, aunque en el "barrido" realizado este miércoles en el local por una empresa especializada no se localizó ningún dispositivo oculto.

A pesar de ello, la exnovia del hijo de Jordi Pujol ha enviado un escrito al Juzgado Central de Instrucción número 5 de Madrid en el que denuncia la interceptación de sus comunicaciones, incluidas conexiones en el wifi de su domicilio, y pide protección porque teme por su integridad física.

En relación a todo esto, Sánchez-Camacho reprochó al resto de partidos catalanes y al gobierno de Artur Mas que hayan usado los supuestos casos de espionaje político para "atacar" a su partido.

"Lamento la falta de ética, de principios y de convicciones del resto de fuerzas políticas catalanas, ante un caso grave y claro de espionaje político", añadió Camacho.

Sobre este asunto, Rubalcaba habló también en el Congreso y calificó de "repugnate" cualquier tipo de espionaje político. "Me parece repugnante si se hace en Barcelona y me parece repugnante si se hace en Madrid, siempre", ha recalcado.

Por su parte, el diputado de CiU Josep Sánchez Llibre calificó  de "deleznable" que pudiera existir esta red de espionaje, lo que a su juicio sería "una guerra sucia" entre partidos para obtener lo que no han conseguido en las urnas.