La presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, calificó este jueves como "un día muy triste para la democracia" después de que este miércoles el Tribunal Constitucional legalizara Sortu, y afirmó que "a lo mejor hay que empezar a pensar" en que el Constitucional se convierta en "una sala del Supremo".

"Ha llegado el momento de plantearse muy seriamente por qué tiene que haber un Tribunal Constitucional nutrido de políticos que se llaman magistrados pero que no lo son, y si hay que hacer recortes a lo mejor hay que empezar a pensar que sea una sala del Tribunal Supremo", dijo la líder del PP de Madrid.

Aguirre cree que con la legalización del partido abertzale el Constitucional, máximo tribunal en España, ha querido "enmendarle la plana" al Tribunal Supremo "de nuevo". En su opinión, se ha dado cobertura a una formación "que no ha querido condenar los asesinatos de ETA y se ha negado a pedir su disolución".

Aguirre se refirió también al hecho de que a la magistrada del Tribunal Constitucional Elisa Pérez Vera, encargada de redactar la sentencia sobre Sortu, fuera también en el pasado ponente de las resoluciones sobre el Estatuto de Cataluña y Bildu, el partido con el que la izquierda independentista vasca concurrió a las últimas elecciones municipales y autonómicas y a las generales.

"¡Qué casualidad!", exclamó la presidenta, que añadió: "Hace año y medio que se sabía (que el Tribunal Constitucional debía resolver el recurso de Sortu contra la prohibición de inscribirse como partido político) y a mí me parece una vergüenza".