Todo ello, cuando "Irán haya respondido de forma positiva al llamamiento de la Junta de Gobernadores del OIEA a suspender sus actividades relacionadas con el enriquecimiento y procesamiento de uranio como una medida de creación de confianza".

Además, el responsable del OIEA "insta con vehemencia" a Irán a crear las condiciones necesarias para "reanudar estas conversaciones, con la participación de Estados Unidos y con la vista puesta en lograr un acuerdo exhaustivo que sea aceptable tanto para la comunidad internacional como para Irán".

Reunión en Viena

En Viena se reunirán el jueves, los cinco países con derecho a veto del Consejo de Seguridad de la ONU (EEUU, Rusia, Francia, China y el Reino Unido), más Alemania y la Comisión Europea.

Su objetivo: ultimar un paquete de incentivos para convencer a Irán de que suspenda su programa de enriquecimiento de uranio.

Ese material, cuya producción es legal bajo derecho internacional, es especialmente sensible debido a su posible doble uso, militar y civil.

Irán insiste en su derecho de producir ese material como firmante del Tratado de No Proliferación de armas nucleares (TNP), mientras que la Junta de Gobernadores del OIEA y la gran parte de la comunidad internacional exigen que suspenda esas actividades como medida de creación de confianza.

Sin relaciones diplomáticas

Estados Unidos rompió relaciones diplomáticas con el régimen de los ayatolás en 1979 debido a la crisis de la toma de rehenes en su embajada en Teheran.

Sin embargo, Washington había abierto la puerta recientemente a un posible diálogo con Irán para hablar de la transición iraquí.

Este diálogo, no obstante, no preveía, por decisión de Estados Unidos, incluir la crisis nuclear, a pesar de los intentos del Gobierno de Mahmoud Ahmadinejad.

NOTICIAS RELACIONADAS