Técnicos de Consumer Eroski visitaron, dos veces cada uno y en días distintos del pasado mes de marzo, 425 espacios públicos en los que está prohibido fumar o en los que se exige una zona habilitada para ello en 18 ciudades distintas.

En cada una de esas ciudades se visitaron en horas de máxima afluencia y durante 45 minutos en cada una de las dos ocasiones diversos establecimientos públicos, incluídos aeropuertos, bancos, restaurantes, discotecas, estc.

Los técnicos analizaron las zonas de acceso público y comprobaron si alguien fumaba, si había o no señalización de prohibido fumar, si las zonas de fumadores estaban bien habilitadas e indicadas, si olía a tabaco al entrar, si en el suelo se veían colillas y si los empleados de los establecimientos vendían tabaco -la ley lo prohíbe.

La ley, papel mojado en muchas ocasiones

Al examinar los espacios en los que la restricción de fumar es total, los técnicos encontraron que se fumaba en un 60% de las discotecas para menores, en la mitad de los mercados de abastos, en el 35% de las universidades, en el 30% de los parkings cubiertos, en uno de los cuatro metros visitados, en el 15% de los institutos y el 5% de los museos, bancos y cajas de ahorro, y ayuntamientos, además de encontrar restos de colillas en varios de los hospitales visitados.

Se mejora, a pesar de todo

A pesar de todo, la situación, concluye el estudio, ha mejorado.

Esto es así porque en "las universidades se ha pasado del 100% de hace tres años al 35% actual, en aeropuertos del 100% al 40%, en estaciones de tren del 92% al 30%, en institutos del 42% al 15% y en hospitales del 33% al 0%".

Los pequeños, una cantera de fumadores

El estudio detectó que se fumaba en un 60% de las discotecas para menores y que "en un 22% de estas discotecas light se vio a menores comprando cigarrillos de máquinas expendedoras, cuando la ley establece que no podrán instalarse estas máquinas en espacios en los que está prohibido fumar y a su vez prohíbe que los menores de 18 años utilicen máquinas expendedoras de tabaco".

Fuma que te fuma

En cuanto a los lugares en los que rigen las restricciones parciales, se "vieron personas fumando en todas las discotecas de adultos visitadas, en el 85% de bares y restaurantes de más de cien metros cuadrados, en el 60% de los hoteles, en el 55% de las estaciones de bus, en el 40% de los aeropuertos, en el 35% de los centros comerciales y en el 30% de las estaciones de tren".

En tres de cada cuatro lugares públicos con zona habilitada para fumadores, la gente fumaba fuera de los mismos, incluyendo 9 de cada 10 personas en las discotecas para adultos y un 95% en trenes y aeropuertos.

Pocas zonas

El informe también señala el ritmo lento al que se crean zonas de fumadores.

De las 215 zonas que podrían contar con zona de fumadores examinadas, sólo algo más de la mitad contaban con una.

Los empleados también fuman menos

En cuanto a los empleados de los sitios públicos, el estudio concluye que en el 1% de los espacios públicos visitados fumaba algún empleado, mientras que en último estudio realizado, en 2003, un 24% le daba al tabaco, lo que también apunta a que vamos por el buen camino.

NOTICIAS RELACIONADAS