¿Qué estrategia puede haber empujado a Netflix, uno de los servicios estadounidenses de alquiler de películas más populares para subir sus tarifas?
La decisión fue anunciada el martes: la empresa online, que cobra a sus clientes una tarifa plana por el visionado de un número determinado de películas, tenía intención de subir la tasa a sus suscriptores hasta un 60%.
Esto podría deberse, según los analistas, a esconder "una apuesta de la compañía por abandonar su oferta de DVD". Lo cierto es que los videoclubs online llevan tiempo buscando una oferta competitiva.
La compañía informó del cambio de precios en una comunicación a sus clientes y un comunicado en su blog, donde detalló que la actual cuota mensual que permite el acceso a películas y series de televisión en streaming y el servicio de envíos por correo de DVD pasará de costar 9,99 dólares a 15,99 dólares.
Netflix añade dos nuevas tarifas, una para cada tipo de formato.
Los clientes podrán disfrutar de los cerca de 20.000 títulos alojados en los servidores de la empresa por 7,99 dólares al mes, el mismo precio que tendrá el tradicional reparto a domicilio de DVD.
"(Netflix) querría que sus clientes de DVD se pasen a la web o paguen más", comentó Peter Kafka, experto de All Things D, del diario The Wall Street Journal.
La compañía, sin embargo, asegura que ve "una larga vida al servicio de DVD por correo" y por eso estableció una tarifa exclusiva para ese formato.
Netflix convirtió en éxito el negocio del videoclub por correo y suscripción, un sistema por el que sus clientes creaban listas con las producciones que querían ver y la empresa les enviaba a sus domicilios los DVD correspondientes.
Una vez devueltos, los clientes recibían los siguientes DVD en su lista.
En noviembre de 2010, Netflix estrenó un servicio para el visionado de algunas de las películas de su catálogo directamente por Internet. En un principio fue de acceso gratuito para los usuarios y se ofreció por 7,99 dólares a los nuevos clientes, una tarifa que incluía tanto streaming como DVD.
Ese precio se redondeó a 9,99 dólares y en septiembre subirá a 15,99 dólares, si bien el precio está en vigor para los nuevos usuarios.
Este mes, Netflix anunció sus planes de llevar su servicio a América Latina y en 2012 tiene previsto su desembarco en España.
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