En una sentencia notificada el lunes, la sección tercera de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional declara probado que, el 17 de marzo de 2003 y cuando Garzón le dijo a I. J. Bilbao Goikoetxea que podía retirarse, "éste se quedó de pie frente al juez e hizo un ostensible gesto con su mano derecha de apuntar al mismo y efectuar varios 'disparos', al tiempo que le decía que iba a terminar con él".

El juez Garzón compareció como testigo en el juicio a Bilbao y dijo que se había tomado en serio aquellas amenazas y que las manifestaciones del etarra fueron "objetivamente intimidatorias".

La sala dice que esta conducta tiene 'la entidad suficiente para merecer la repulsa social y servir de soporte al juicio de antijuricidad'".

Las amenazas dirigidas por Bilbao a Garzón y al tribunal que le juzgó el pasado 25 de febrero no son las únicas proferidas por el etarra contra miembros de la judicatura, ya que este etarra ha protagonizado escenas similares, por las que aún no ha sido juzgado, con los magistrados de la Audiencia Nacional Fernando Andreu y Teresa Palacios.

Ignacio Javier Bilbao Goikoetxea está condenado, además, a 45 años de prisión por el asesinato a tiros del concejal socialista de Orio (Guipúzcoa) Juan Priede en marzo de 2002.