El primer ministro sirio, Adel Safar, dictó este miércoles una resolución para crear una comisión que prepare un nuevo proyecto de ley para la celebración de elecciones generales, según informó la agencia de noticias estatal Sana.

El comité, integrado por ocho expertos juristas, tiene que presentar los resultados de su trabajo al primer ministro en un plazo no mayor de dos semanas.

Esta medida se produce en medio de las protestas políticas en Siria contra el régimen de Bachar al Asad que el pasado 21 de abril derogó el estado de emergencia en vigor desde 1963.

El responsable del comité, Neyem al Ahmed, subsecretario del Ministerio de Justicia, dijo a Sana que ya han comenzado su tarea y que la finalizarán en el tiempo fijado.

"La comisión lleva a cabo un estudio de las leyes árabes e internacionales para escoger lo que mejor tienen", indicó Al Ahmed, quien agregó que establecerán contactos con un gran número de especialistas para recabar opiniones y beneficiarse de su experiencia.

Según Al Ahmed, su objetivo es elaborar un borrador de ley para los comicios generales similar a los mejores que están vigentes en el mundo.

El pasado 21 de abril, Al Asad aprobó a la eliminación del Alto Tribunal de la Seguridad del Estado y respaldó una nueva ley que garantizaba el derecho a celebrar protestas pacíficas.

La agencia estatal de noticias no hizo mención a la paralizada ley de partidos que, según fuentes gubernamentales, se estaba revisando un borrador de la misma, prometida en 2005 en el congreso del partido Baaz, la formación política de Al Asad.

Esta última normativa permitiría la creación de partidos políticos, siempre y cuando no estén basados en agendas étnicas o religiosas, y estaría vinculada a la nueva ley electoral.

Las protestas en Siria se han recrudecido en los últimos días y este miércoles el Ejército bombardeó el distrito residencial de Bab Amro, en la tercera ciudad del país, Homs, que fue tomada el martes por grupos opuestos al régimen de Bashar al Assad.

Además, más de una veintena de personas murieron el viernes al reprimir las fuerzas de seguridad sirias las protestas de la oposición celebradas en las ciudades de Homs y Hama, al norte de Damasco, según activistas sirios.