Saiz y el resto de detenidos sólo pueden ser juzgados en la actualidad por un delito contra la salud pública.

Según cita el Código Penal, en su artículo 368: "Los que ejecuten actos de cultivo, elaboración o tráfico, o de otro modo promuevan, favorezcan o faciliten el consumo ilegal de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas, o las posean con aquellos fines, serán castigados con las penas de prisión de tres a nueve años y multa del tanto al triplo del valor de la droga objeto del delito si se tratare de sustancias o productos que causen grave daño a la salud, y de prisión de uno a tres años y multa del tanto al duplo en los demás casos."

Sin embargo, ayer mismo el Proyecto de Ley orgánica de protección de la Salud y de Lucha contra el Dopaje ha iniciado su tramitación en la Comisión de Educación y Ciencia del Congreso.

Ningún grupo parlamentario presentó enmiendas a la totalidad.

El CSD espera que esté aprobada antes de que finalice este año.

Porque modificará las leyes del Deporte, de Protección de Seguridad Ciudadana, la Reguladora de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa y el Código Penal.

En este caso, al haber sido cometidas las acciones antes de la entrada en vigor de la nueva ley, según el principio básico de seguridad jurídica de irretroactividad de la ley, los implicados serán juzgados únicamente por un delito contra la salud pública, el citado artículo 368.

En realidad, intervino la unidad UCO de este cuerpo, especializada en blanqueo de dinero, tráfico de estupefacientes u otros delitos que se llevan a cabo por Internet.

El diario Marca apunta que desde hacía dos años tenían contacto "periódico" con el laboratorio de Madrid del Consejo Superior de Deportes, "recabando información".

Al parecer, una de las acciones que ha posibilitado las pesquisas eran las intervenciones en los teléfonos de los detenidos.

No fue por una denuncia de la Federación Española de Ciclismo, como señaló la Cadena Ser en un principio.

Eugenio Bermúdez, secretario de la Federación Española de Ciclismo, desmintió a 20minutos.es ninguna relación con lo sucedido.

Recordemos que, aunque a un nivel inferior, el Ministerio de Interior ya realizó operaciones contra el dopaje: ‘Mazas’ (2004), ‘Mazas’ (2005) y ‘Gamma’ (2005).

También se ha apuntado que el detonante de esta operación se inicia con el dopaje de Roberto Heras en la Vuelta a España.

Aunque el juez Antonio Serrano Arnel (del juzgado número 31 de Plaza Castilla) ha decretado secreto de sumario y los protagonistas y sus respectivos abogados no podrán realizar declaraciones públicas sobre el caso, sí se han ‘filtrado’ detalles, con más o menos fiabilidad.

Por ejemplo, el diario Marca relata que en los registros hechos en varios pisos había "un millar de dosis de anabolizantes, esteroides y hormonas, además de dos centenares de bolsas de sangre". Aunque en diferente número, la agencia Efe también ha apuntado este tipo de productos.

Se supone que esto se utilizaría para las llamadas autotransfusiones, de la que puede saber más en esta breve explicación.

También se encontró todo tipo de material para hacer las autotransfusiones:  máquinas de congelación y para inyectar la sangre.

Si se prueba a quién pertenece esta sangre, quizá los implicados en la operación sean más. Muchos ciclistas españoles podrían verse inmersos en este caso.

Los pisos registrados: dos en Madrid a nombre de Eufemiano Fuentes, otro también de Madrid (calle Zurbano, 92) donde hay una clínica a nombre de Merino Batres y el último en Zaragoza a nombre de Labarta.

Es importante apuntar que el hematólogo José Luis Merino Batres ha gestionado el Centro de Transfusiones de la Comunidad de Madrid.

De momento, no se ha registrado las dependencias del equipo Liberty Seguros ni el domicilio de Manolo Saiz según la Cadena Ser.

Otros rumores, en breve:

- Podía haber una red internacional si se encuentran conexiones.

- Iván Basso podría estar implicado por estar relacionado con Eufemiano Fuentes según la Cadena Ser.

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