Tom Boonen vence en Córdoba y Bennati se viste de oro por las bonificaciones

  • El jienense Manuel Ortega rodó fugado casi desde la salida.
  • Paolo Bettini lo intentó en la ascensión al sinuoso San Jerónimo.
  • La justicia belga le retiró hoy a Boonen el carnet dos meses.
Tom Boonen, ganador de la tercera etapa de la Vuelta Ciclista a España 2008 (EFE)
Tom Boonen, ganador de la tercera etapa de la Vuelta Ciclista a España 2008 (EFE)
REUTERS
Tom Boonen, ganador de la tercera etapa de la Vuelta Ciclista a España 2008 (EFE)
El belga Tom Boonen, campeón del mundo de ciclismo en 2005 y uno de los grandes nombres del pelotón de la Vuelta,
impuso su punta de velocidad en la tercera etapa de la Vuelta a España, que unió Jaén y Córdoba sobre 168 kilómetros y en la que el italiano
Daniele Bennati, segundo al final, alcanzó el jersey oro de líder gracias a las bonificaciones.

Un triunfo que ayuda rehabilitar deportivamente a Boonen, un corredor impresionante que, sin embargo, este año no pudo disputar el Tour al ser vetado por la organización: dio positivo por cocaína en un control fuera de la competición en mayo, dos días antes de la Vuelta a Bélgica; su imagen (Boonen es todo un ídolo en Bélgica, a la altura de un Pau Gasol o un Rafa Nadal en España) se debilitó por éste escarceo y su excesivo amor por la velocidad cuando está al volante.

Hoy, precisamente, la justicia belga le condenó hoy a dos meses sin permiso de conducción y a más de 1.500 euros de multa por dos procesos separados, los dos relacionados con una conducción a velocidad excesiva; y en uno de ellos, además, superando el nivel máximo de alcohol. Los 11.000 euros de premio que se lleva cada ganador de etapa en la Vuelta le vendrán bien para tapar este "agujero".

Calor y galopada de Manuel Ortega

Hasta la llegada masiva en las calles de Córdoba, la tercera etapa tuvo tres protagonistas: el fuerte calor que sufrieron los ciclistas, la galopada de Manuel Ortega (Andalucía-Cajasur) y el ataque de Paolo Bettini (QuickStep) en las rampas de San Jerónimo, única dificultad montañosa del día.

Ortega atacó casi de salida. Siendo natural de Jaén (la ciudad de salida) y llegando a Córdoba (la ciudad en la que el Andalucía-Cajasur de Antonio Cabello tiene su sede) era obligado un movimiento del ciclista del equipo que, de momento, es el gran animador de esta Vuelta.

Ortega alcanzó una renta máxima ligeramente superior a los 15 minutos (km 54), una fruslería ante un pelotón controlado por el Caisse d'Epargne del líder Valverde, con colaboraciones esporádicas de Liquigas. Ahí estuvo el techo de Ortega, cuyo ritmo fue a menos por culpa de la fatiga. El fugado pasó por el sprint intermedio de Córdoba sabedor de que la subida a San Jerónimo finiquitaría sus opciones. El italiano Bennati, por su parte, acariciaba el jersey oro al hacer segundo en los dos 'sprint' intermedios de la jornada.

Ataque de Bettini

Con Ortega cediendo segundos con cada pedalada en la subida a San Jerónimo (de tercera), varios fueron los intentos de escapada en el grupo. El más sobresaliente, con permiso del conato del francés Sylvain Chavanel (Cofidis) en la parte final del puerto, fue el de Paolo Bettini. El doble campeón del mundo, compañero de Boonen en el Quick Step, atacó en la subida, soltó al ruso Kolobnev (CSC-Saxo Bank), alcanzó a Ortega y afrontó los últimos doce kilómetros en solitario.

Pero el Liquigas, organizado, puso al pelotón a 74 km/h, cazó a Bettini y devoró los últimos kilómetros hacia una llegada masiva cantada, pero para la que se borró Óscar Freire (Rabobank). Boonen fue insuperable, Bennati hizo segundo; el veterano Zabel (Milram) tiene clase para acabar tercer y Koldo Fernández de Larrea (Euskaltel) finiquitó la jornada en cuarta posición.

Para este martes, la Vuelta afronta su cuarta etapa: 170,3 kilómetros entre Córdoba y Puertollano (Ciudad Real). Otra jornada en la que las carreteras sinuosas de Sierra Morena fomentarán los intentos de fuga y el calor, seguro, hará de las suyas.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento