La NBA arrancó hace algo más de dos semanas y cada equipo ha disputado entre ocho y diez partidos en los que ya se puede atisbar lo que puede ser la temporada. Y en el caso de los españoles hay buenas noticias en líneas generales, pero también algunos signos preocupantes tanto individual como colectivamente.

Sin duda, la mejor noticia es la perfecta recuperación de Ricky Rubio y ver que está a su mejor nivel. Cuando se habla de él, nadie duda ni de su capacidad para dirigir con acierto ni de su fantasía, pero sí de su errático lanzamiento y de su escasa anotación. Pues bien, esta temporada ha mejorado sus porcentajes (casi un 40% en tiro) y está en 13 puntos por noche, superando en 3 su media en la NBA.

Además, los Timberwolves están siendo una de las sorpresas agradables de la temporada. Son quintos en la durísima Conferencia Oeste (al cierre de esta edición), y tienen un bagaje positivo (4 victorias, 3 derrotas). Nadie apostaba por ellos en los playoffs, pero el buen rendimiento del número 1 del draft, Karl-Anthony Towns, el liderazgo de Wiggins (más de 30 puntos en sus dos últimos partidos) y la buena labor de Ricky en la dirección hacen que Minnesota sueñe con volver a unos playoffs 12 años después.

Siguiendo con las buenas noticias, nos encontramos con la temporada que está realizando Niko Mirotic. Tuvo un inicio arrollador, llegando a ser el referente ofensivo de los Bulls, y aunque después ha llegado un bajón, el hispano-montenegrino es titular indiscutible y promedia 13,3 puntos con dos triples por encuentro. Poner remedio a su irregularidad debe ser su objetivo.

Mirotic comparte hace dúo interior en Chicago con un Pau Gasol plenamente consolidado. Pese a que ha empezado con un pequeño bajón en sus números, especialmente en ataque, sigue siendo decisivo y pieza clave en un equipo que aspira a plantar cara a Cleveland en el Este. De momento, su balance es positivo (5-3) mientras tratan de adaptarse al estilo del nuevo técnico, Fred Hoiberg, más alegre y menos encorsetado que el de su antecesor, Tom Thibodeau.

Para Serge Ibaka, tener sanos tanto a Westbrook como a Durant está resultando positivo. El hispano-congoleño está cómodo en su rol de 'tercera pata' con una buena aportación en ataque y su habitual fortaleza defensiva.

El inicio de Marc Gasol ha sido más flojo de lo esperado para el elegido mejor pívot de la NBA. Sus problemas en el cuello han lastrado su rendimiento, y para colmo los Grizzlies han comenzado muy mal la temporada. Memphis es, con 91 puntos por partido, el peor equipo en ataque de la Conferencia Oeste y el segundo peor de la NBA, solo detrás de Brooklyn Nets.

Pero sin duda, el peor arranque ha sido el de José Manuel Calderón. Es el base titular de los Knicks, pero su aportación es escasa y su juego, irrelevante. Desastroso en el tiro (37,7% de acierto), aporta poco en ataque tanto en puntos (6,4) como en asistencias (3,0). Debe mejorar o perderá el sitio en Nueva York.