Las mejores actuaciones musicales inundan el XXI Festival del Habano

Son… rumba… salsa… y los mejores artistas internacionales… Una coctelera de ritmos, melodías y colores ha inundado la última edición del Festival del Habano. Y ha dejado claro que aunque los protagonistas absolutos son los habanos, el festival apuesta fuerte por las propuestas musicales más diversas.La Noche de Bienvenida, dedicada al 500 aniversario de La Habana y a los 20 años de la marca San Cristóbal de La Habana se inició con un dueto mágico y emocionante: la joven intérprete cubana Yulaisy Miranda se metió en el túnel del tiempo para cantar, nada menos, que junto a Benny Moré el eterno bolero “Como Fue”.Además artistas cubanos como la histórica Orquesta Aragón pusieron la ambientación ideal a una noche irrepetible a ritmo de sarandonga. El grupo de pop Buena Fe se encargó del broche final a esta primera noche de festival.Para la Noche Intermedia, homenaje a Hoyo de Monterrey, y celebrada en el Salón de Protocolo de El Laguito, se alternaron los bailes de los vegueros zancudos con los fraseos típicos de los repentistas, patrimonio musical cubano, y las guajiras de María Victoria Rodríguez Sosa, la voz de la música campesina en Cuba. Pianistas de jazz como Ernan Lopez-Nussa se combinaron con el ritmo endiablado del grupo de Manolito Simonet y su Trabuco.Aunque si hay una noche especialmente musical, esa es la Noche de Gala que está edición estuvo dedicada al 50 aniversario de la marca Trinidad y fue una explosión de sonidos, baile y percusión. Bajo la atenta batuta de la Orquesta del Maestro Patterson fueron desfilando por el flamante escenario los mejores artistas cubanos como Waldo Mendoza, Osdalgia, Janet Valdés o Haila. Uno de los momentos de la noche fue este “Killing me softly” del compositor americano Charles Fox que sonó más latino que nunca.Y la salida a escena de Armando Manzanero encogió el corazón a más de uno cuando empezó a recordar sus clásicos.El portorriqueño Gilberto Santa Rosa, el Caballero de la Salsa, cerró el festival con su espectacular orquesta y puso a bailar hasta al más parado.