Una cacería con 447 animales abatidos desata la polémica entre cazadores y ecologistas: "No podían escapar"

Ecologistas en Acción de Córdoba denuncia lo que considera una “orgía de sangre y muerte” y además que la macrocacería no se realizó en campo abierto sino en una finca cerrada, sin posibilidad de escape para los animales.

​Aun así la montería fue totalmente legal y necesaria, asegura la Real Federación española de Caza, para el control de las especies y el mantenimiento del equilibrio del entorno.