Declara ante el juez Ana Mari, la mujer que fue rociada con sosa cáustica

Con la cabeza vendada y acompañada de su marido y padre. Así ha llegado Ana Mari esta mañana a los juzgados para sentarse ante el juez. Lo hace un mes después de denunciarlo por amenazas y de que otro juzgado le rechazará una orden de protección. A primera hora y en coche policial, entraba el agresor en el juzgado. Él es último en declarar y también acusó al marido de Ana por un intento de atropello. Los 3 mantienen denuncias cruzadas desde hace un mes. Madre e hija rociadas con sosa cáustica han recibió el alta después de 3 días de ingreso. Las quemaduras en cara, cabeza y cuerpo son graves. La recuperación será larga y costosa.