Las personas con este grupo sanguíneo tienen más probabilidades de contagiarse de covid

Glóbulos rojos, sangre
UMU

Desde hace tiempo se sabe que hay personas que parecen tener un mayor riesgo que otras de contraer la covid y de sufrir las formas más graves de la enfermedad. El porqué de esto se ha buscado en muchos lugares, y uno de ellos es en la sangre.

Así, recientemente un estudio publicado en la revista PLOS Genetics ha analizado más de 3.000 proteínas en la sangre en busca de aquellas que se relacionan con una mayor severidad del cuadro clínico. Con este objetivo en mente, han identificado seis que parecen asociarse a un mayor riesgo de covid-19 grave y ocho que, por el contrario, se asocian a una enfermedad más leve.

El grupo A, de mayor riesgo

Entre las que han catalogado como preocupantes, que pertenecen a la familia de las enzimas endocannabinoides, se encuentra la AB0, responsable de determinar el grupo sanguíneo de cada persona.

Esto refuerza trabajos anteriores que han encontrado que entre los positivos por covid el grupo sanguíneo más frecuente es el A. Cabe destacar que esto implica que sus glóbulos rojos expresan antígenos de tipo A en su superficie y su plasma contiene anticuerpos contra los antígenos B.

Otras proteínas que se han asociado a un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves son la CGNT4, la CD207, la RAB14, la C1GALT1C1 y la FAAH2. Por el contrario, las altas concentraciones de SELL, SELE, PECAM-1, LCTL, SFTPD, KEL, ATP2A3 e ICAM-1 parecen traducirse en una menor probabilidad de sufrir complicaciones graves a consecuencia de la enfermedad.

De todas maneras, los propios investigadores recuerdan que aunque esto confirma esas sospechas, hasta ahora no ha sido posible determinar la naturaleza concreta de la relación entre el perfil de proteínas y la gravedad de la enfermedad. En este sentido, aún es necesario investigar más a fondo la cuestión.

Lo que sí que opinan es que, continuando por esta senda, profundizar en la relación que existe entre las proteínas en sangre y la gravedad de la covid-19 puede ser un punto de partida en el desarrollo de nuevas terapias, especialmente preventivas.