Aunque no nos haya tocado ningún premio, necesitábamos las imágenes de felicidad que nos ha dejado el Sorteo de la Lotería de Navidad. Han sido un regalo. Por unas horas hemos podido desconectar de la pandemia, y ver a la gente llorando de alegría y celebrando algo nos ha permitido sentir una pizca de esperanza justo en medio de mensajes de alerta por el incremento de contagios a tan solo unas horas de Navidad. Ha sido el verdadero premio.