Un ciudadano ecuatoriano, identificado como W.W.H., de 48 años de edad, ha aceptado una pena de 5 años y 11 meses de cárcel por un delito de agresión sexual en grado de tentativa y un delito de lesiones graves, cometidos en Valdepeñas (Ciudad Real) en julio de 2009.

En principio, el fiscal pedía para este hombre un total de 9 años de cárcel por un delito de agresión sexual y otros tres años y medio de prisión por el delito de lesiones.

Según ha informado el fiscal jefe de la Audiencia de Ciudad Real, Jesús Caballero, antes de alcanzar el acuerdo entre las partes, en una pequeña vista celebrada, la víctima, E.M.F., de 33 años, ha señalado que el hombre no consumó la agresión sexual, por lo que el Ministerio Fiscal ha modificado sus conclusiones dejándolo en intento de agresión sexual, bajando la pena de 9 años a dos años y medio.

En esta pequeña vista, ambos, por otro lado, han reconocido que la noche que ocurrieron los hechos los dos ingirieron grandes cantidades de alcohol y cocaína.

El fiscal ha avanzado que, cuando se redacte la correspondiente sentencia de conformidad, se verá la posibilidad de cambiar la pena, al ser menor de seis años, por la expulsión del país, dado que el acusado está en situación irregular en España.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 17 de julio de 2009, cuando el acusado y la víctima estuvieron bebiendo juntos y, en un momento dado, él se ofreció a llevarla a su casa en su moto.

En lugar de llevarla a casa, el hombre la trasladó a una nave industrial donde él tenía su domicilio y le pidió tener relaciones sexuales, a lo que la mujer se negó.

Acto seguido, el hombre la tiró sobre la cama agarrando un cuchillo de sierra de 17 centímetros de largo, con el que la rasgó la camisa que llevaba puesta y le pinchó el pecho izquierdo.

A continuación, según se recoge en el escrito de acusaciones, le hizo un corte en la zona del cuello y consumó el acto sexual —algo negado este martes por la víctima—, para después amenazarla con una pistola simulada y decirle "te voy a pegar un tiro".

A las 10.00 horas del día siguiente, se presentó en un establecimiento regentado por O.S.G., al que contó lo que había hecho que fue el encargado de avisar a la Policía, tras lo que el presunto acusado fue detenido.