El presidente ejecutivo de la Candidatura de Tarragona para los Juegos Mediterráneos de 2017, Mario Rigau, ha asegurado que tras perder esta tarde la votación para ser la sede en 2013 —la ganadora ha sido Mersin (Turquía)— el proyecto tarraconense será "ganador" para la próxima elección.

"Ya dijimos que éstos era unos Juegos de urgencia y por ello significaban un recorte muy importante en muchas cosas de nuestro proyecto original. Ahora lo recuperamos, y está claro que con la seguridad de que somos candidatura ganadora", ha manifestado en declaraciones a Europa Press.

Además, Rigau ha señalado que, con la elección de Mersin, se anula el único punto que podría ir en contra de Tarragona 2017: "Esta elección rompe con las rotaciones de ediciones seguidas en la parte europea. Ahora, con Mersin, no será así porque es la parte árabe del Mediterráneo. El único argumento en contra de Tarragona queda anulado", ha argumentado.

"Rijeka (Croacia) enfría su candidatura, y Alejandría (Egipto) y Trípoli (Libia) pertenecen a países que todos sabemos como están en estos momentos", ha añadido.

"En 2017, Tarragona tendrá la oportunidad de organizar los magníficos Juegos que queríamos. Ahora, a luchar hasta octubre", ha sentenciado, y es que será entonces cuando se decida la ciudad sede para los Juegos del 2017.

"Si hace cuatro años nos llegan a decir que en 2013 seríamos finalistas y que para 2017, en nuestro proyecto original, estaríamos en una posición inmejorable, lo habríamos firmado de todas, todas", ha indicado en cuanto al resultado de esta tarde.

Precisamente, ha añadido que, en contra de la candidatura tarraconense para 2013, que era "de urgencia", jugaba la experiencia de Mersin y el recuerdo de Almería.

"Sabíamos que había dos elementos que jugaban a favor de Mersin. Uno, que ya compitieron con Volos en 2013 y que Almería 2005 estaba muy cerca. Aún así, hemos hecho los deberes, hemos presentado un proyecto muy solvente y nos ha permitido ser finalistas", ha celebrado.