Los hosteleros cántabros, dispuestos a hacer un "cierre masivo" ante la "angustia" derivada de la ley antitabaco

Emérito Astuy alerta de una caída en las ventas y una pérdida de empleo en el sector desde la entrada en vigor de la norma

Los hosteleros cántabros están dispuestos a realizar un "cierre masivo" para protestar por la situación de "angustia" que vienen padeciendo desde la aplicación de la Ley Antitabaco, que está provocando una caída en las ventas del sector así como una pérdida de empleo.

Ahora bien, ese cierre tiene que ser "absolutamente masivo", es decir, tiene que secundarlo una "mayoría abrumadora" de los hosteleros porque, de lo contrario, no tendría sentido, según ha puntualizado este martes el presidente de la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria (AEHC), Emérito Astuy, que ha informado de los acuerdos adoptados en la Asamblea Extraordinaria celebrada en la tarde del lunes.

En rueda de prensa, Astuy ha explicado que desde la agrupación que preside están enviando cartas a los hosteleros asociados para que se comprometan a cerrar de forma masiva, toda vez que la "mayoría" de los asistentes a la asamblea estaban a favor de la medida. Dicho cierre coincidiría con una manifestación conjunta del sector de todas de las comunidades a celebrar en Madrid, en una fecha aún por determinar.

A dicha manifestación hay que sumar la que se realizará en Santander, ante la sede de la Delegación del Gobierno en Cantabria, y que se tiene que coordinar con el resto de asociaciones de hostelería del país. Con motivo de esta convocatoria, los hosteleros cántabros cerrarían de forma parcial, durante unas horas, para acudir a la manifestación.

Astuy, que ha reconocido que es "complicado" organizar un cierre que implique a la totalidad del sector, se ha mostrado convencido de que la afluencia a la manifestación va a ser "multitudinaria" debido a la trascendencia de la Ley Antitabaco, que "tantísimo daño" está haciendo a la hostelería.

Pérdidas en las ventas y el empleo

Así, ha asegurado que los hosteleros cántabros han pasado de la "preocupación" a la "desesperación" y la "angustia", debido a las pérdidas que la norma está acarreando y que "no son ninguna broma", y a la "evidente" caída en el empleo.

Tras insistir en que este colectivo está de acuerdo con que se luche contra el tabaco y, por tanto, a favor de "la esencia" de la ley, el presidente de los hosteleros de la región ha matizado que lo que reivindican es que no se lleve la norma al "extremo" y se habilite un lugar dentro de los establecimientos en el que se pueda fumar, ya que los fumadores son una parte "muy importante" de sus clientes. Así, por ejemplo, en los locales de ocio nocturno representan una "mayoría abrumadora". ESPERANZA

Por eso lamentan que el Gobierno no les haya "recibido" ni "escuchado". "Todos estos genios que tenemos en el Gobierno han pensando en lo malo que es el tabaco pero no han pensando en las consecuencias económicas que tiene para un sector fundamental para Cantabria y para el desarrollo económico nacional", ha manifestado Astuy.

En este sentido, y aunque es "muy complicado" cambiar una norma que ha contado con el respaldo de todos los partidos políticos, los hosteleros tienen "ciertas esperanzas" debido a las enmiendas que introdujo el PP y que recogían sus peticiones, aunque finalmente dichas enmiendas fueron rechazadas.

Una vez que conocen la postura del PSOE, que "ni nos ha recibido", los hosteleros piden a los otros dos partidos con representación en Cantabria, PP y PRC, que se posicionen y muestren "claramente" su postura y si "suavizarían" la ley en el caso de que gobernasen y tuviesen las competencias de Sanidad para que ésta no sea "tan restrictiva como la actual", que se ha impuesto de forma "irracional" y sin pensar en las "consecuencias" para los hosteleros, por lo que supone "la puntilla" para este sector.

Al hilo de lo anterior, el presidente de la AEHC ha insistido en que muchos locales se encuentran en una situación "insostenible" y algunos están incluso "a punto de cerrar".

Cambio de costumbres

También ha censurado las "mentiras" de que la norma sea una obligación impuesta desde la Unión Europea y ha alertado de que cuando se cambian las costumbres "no hay vuelta a atrás".

"Nos queremos parecer tanto a Europa que queremos ser tan caseros y tan aburridos como los norte europeos, que se dedican a hacer barbacoas en casa de la gente o a salir de domicilio en domicilio, en lugar de vivir en la calle y en los establecimientos de hostelería como se ha hecho en España durante toda la vida, donde van las familias completas a tomar el 'vermú' y a comer fuera de casa", ha reflexionado Astuy.

Máquinas de tabaco y facilidades para fumar en la calle

Por otro lado, en la reunión se abordó la posible retirada de máquinas expendedoras de tabaco de los bares, restaurantes y cafeterías, pero finalmente se desestimó esta medida al no alcanzarse ningún consenso.

También se debatió sobre la necesidad de que los ayuntamientos no pongan "dificultades" y "faciliten las cosas" a los hosteleros, para que sus clientes puedan fumar en la calle "con comodidad". En este sentido, enumeraron iniciativas como la instalación de quita vientos, toldos, estufas, etcétera.

Seis sanciones a particulares

En relación a las sanciones derivadas de la entrada en vigor y aplicación de la ley, Astuy se ha felicitado porque, según le han trasladado desde la Consejería de Sanidad, se han impuesto únicamente seis sanciones a particulares, no a establecimientos hosteleros, por lo que ha concluido que la norma se está desarrollando de forma "ejemplar".

Ha aprovechado por último para pedir a los hosteleros que sigan así y no caigan en la "tentación" de no cumplir la ley, ya que es algo "muy peligroso" y que puede resultar "más dañino" que el propio cumplimiento de la norma.

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