Un agente de la Brigada de la Policía Judicial de Huelva, encargado de la investigación de la desaparición y muerte de Mari Luz Cortés y presente en Pajaroncillos (Cuenca) cuando el principal acusado de los hechos, Santiago del Valle; la hermana de éste, Rosa del Valle, acusada de coautora y su mujer, Isabel García, declararon en la citada localidad, ha asegurado este lunes en la cuarta sesión del juicio que Isabel García en la citada declaración señaló que Santiago era "el asesino" de la niña.

Este agente ha matizado que Santiago del Valle el día en el que apareció el cuerpo de Mari Luz llamó a su hermano, Francisco del Valle, y en la conversación, escuchada por la Policía, dejó entrever que "sabía donde había aparecido el cuerpo", en el Estero del Rincón.

Del mismo modo, el funcionario ha señalado que en la primera declaración en Cuenca, el día 25 de marzo, Santiago "se autoinculpa y exculpa de los hechos a su hermana y a su mujer" y pide un encuentro con el Fiscal del caso, Alfredo Flores, para negociar su situación, pero Flores se niega a ello.

Asimismo, este agente ha señalado que tanto Santiago, Rosa e Isabel coinciden el 13 de enero de 2008 con Mari Luz "en tiempo y lugar", así como que en ningún momento ni Isabel García ni Santiago del Valle fueron "coaccionados" a la hora de declarar en la citada localidad, tal y como aseguró Santiago al testificar en la primera sesión de esta vista oral el pasado 16 de febrero, sesión en la que dijo se había autoinculpado porque "la Policía lo coaccionó". En esta línea, este agente ha aclarado que el trato con los tres fue "siempre humano, natural y corriente".

En cuanto a la declaración de Isabel García en Pajaroncillos, este agente ha apuntado que ésta voluntariamente accede a declarar y asegura que "tenía mucho miedo de Santiago", así como que en la tarde del 13 de enero "se echó la siesta y cuando se levantó no estaban en la casa ni Santiago ni Rosa. Al poco tiempo llegó Santiago con las botas manchadas de barro amarillo y le pidió que salieran a dar una vuelta, lo encontró nervioso y durante el trayecto se compró dos botellas de agua".

Isabel García, quien pasó esa noche en una pensión por ser imputada pero no detenida ese día, aseguró en su declaración, según ha manifestado el citado agente, que Santiago, al llegar al barrio de Torrejón, le dijo que "si se encontraban a gente en la barriada buscando a una niña que se mantuviera al margen".

La obsesión por mari luz "venía de antes".

Otro agente de la Brigada de Policía Judicial de Huelva también presente en la declaración en Pajaroncillos, ha señalado que tal y como se estaban produciendo las investigaciones, la Policía dedujo por los antecedentes de Santiago y por su matriculación en el Colegio Diocesano Corazón de Jesús, donde estudiaba Mari Luz, que la obsesión por la pequeña "venía de antes" y no fue al azar.

Del mismo modo, este agente ha asegurado que desde el principio dirigieron la investigación hacia Santiago, como presunto culpable de los hechos, por "el fuerte impulso sexual, casi obsesivo", que sentía hacia las niñas, ya que comprobaron que del Valle se pasaba "largas horas asomado por la ventana viendo a niños". No obstante, este agente ha considerado que Santiago, a su juicio, "no es un asesino", y que "la desgraciada muerte de Mari Luz se produjo por el entorno social porque Santiago sabía el peligro que le suponía dejar ir a la niña".

Posible colaboración de rosa

En cuanto a la posible colaboración de Rosa del Valle en los hechos, el primer agente ha señalado que ésta en las continuas entrevistas que mantuvo con la Policía, con la que se mostró colaboradora en todo momento, "nunca confesó haber tenido participación en la desaparición y muerte de Mari Luz". Sin embargo en Pajaroncillos, según ha manifestado el funcionario, Rosa "confesó su participación en los hechos, es decir, aseguró que llevó a su hermano al Carrefour, aunque finalmente lo dejó cerca del Campus del Carmen, pero sin sospechar que la niña pudiese ir en el carrito de la compra que llevaba Santiago". Todo ello, una vez que los agentes le comunicaron que su hermano ya había confesado.

La posible colaboración de Rosa se incluye en la investigación porque, según estimó la Policía, "para la desaparición de la niña, necesitaban un transporte". No obstante, este policía ha remarcado que, a su juicio, Rosa lleva a Santiago al Carrefour "porque se vio abocada a ello, ya que no daba un paso que no diera Santiago", indicando además que el día en el que apareció el cadáver de Mari Luz, el 7 de marzo de 2008, Rosa se encontraba "bajo una tensión nerviosa porque también le impactó la noticia".

Reaccionaron "con sorpresa"

Los agentes han coincidido en que tanto Santiago, Rosa como Isabel reaccionaron "con sorpresa" al ver a la Policía de Huelva en Pajaroncillos, una detención que se llevó a cabo, cuando la Policía tuvo indicios de que se querían marchar a Cuba, ya que Santiago "había preguntado por la Casa de España en Cuba", e incluso había hecho indagaciones en un banco para ver si podría cobrar su pensión en el extranjero.

Por otro lado, este agente ha considerado "muy veraz y coherente" la declaración de Isabel García en la que inculpa a su marido de la desaparición y muerte de Mari Luz, ya que ofrece "detalles muy concretos y no parecía una declaración convenida, insistiendo en que Santiago se la llevaría por delante (hacia la cárcel) si lo delataba". 16,45 HORAS

Este mismo agente ha calificado como dato revelador que tanto Santiago, Rosa como Isabel sitúan los hechos "a las 16,45 horas", a la par que ha matizado que Santiago del Valle en su primera declaración deja entrever que "habría podido participar en los hechos" y en la segunda, confiesa, aunque exculpa a su hermana y mujer.

En un principio, según ha señalado el inspector jefe de la Brigada Judicial de la Policía de Huelva y coordinador de la investigación, Francisco Durán, "se establecieron tres líneas generales: el posible accidente, el secuestro y la posibilidad de un móvil sexual y posterior desaparición". Por ello, el inspector jefe ha incidido en que se buscaron en todos los pisos vacíos en el Torrejón; se interrogó a toda la gente próxima; a presos que habían salido esos días; a trabajadores de la empresa del padre y a gente del mercadillo, entre otras personas.

Del mismo modo, Durán ha explicado que los datos de los primeros días desencadenan en la detención de Santiago en Granada por sus antecedentes y por la salida precipitada de la ciudad de Huelva, no obstante se le puso en libertad porque no tenían indicios suficientes.

Por último y por su parte, la defensa de Santiago del Valle, Juan López Rueda, ha solicitado la declaración del agente de la Policía Local que le tomó declaración al taxista que declaró el pasado jueves que él vio "sobre las 18,00 horas del día 13 de enero a Santiago y a Rosa del Valle montar un carrito de la compra en un coche", pero esta petición finalmente ha sido denegada por el juez.