El secretario general de la Federación Estatal de Metal, Construcción y Afines de UGT, Manuel Fernández López 'Lito', ha advertido hoy de que la nueva normativa aprobada en el Congreso y que obliga a las compañías a recomprar a los concesionarios los coches que éstos no vendan tras 60 días supone "una auténtica barbaridad" que puede puede poner en serio peligro el sector del automóvil.

'Lito', quien esta tarde, junto con el representante de MCA-UGT en Castilla y León, Pedro Luis Hojas Cancho, ha participado en Valladolid en una asamblea de trabajadores para explicarles el contenido del Acuerdo Social y Económico alcanzado entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos, ha asegurado compartir la incertidumbre mostrada por la patronal española de fabricantes de coches (Anfac) en el sentido de que dicha iniciativa, aprobada con los votos de PP y CiU, plantea un "innecesario riesgo" para las inversiones comprometidas por la industria del automóvil y miles de puestos de trabajo en las fábricas.

Aunque no ha querido dramatizar, ya que, como así ha recordado, el 16 por ciento de los vehículos fabricados en España se matriculan en nuestro país y, por ello, el sector vive fundamentalmente de la exportación, el sindicalista, en declaraciones a Europa Press, sí ha apuntado que la nueva ley rompe el equilibrio en las relaciones comerciales entre fabricante-concensionario y puede dar al traste el Plan de Competitividad del Sector de la Automoción.

"Es una barbaridad que unos grupos políticos, atendiendo a no sé que tipo de conversaciones o presiones de los concesionarios, hagan peligrar un sector sin consultar antes con los que tenemos algo que ver con esta película", ha criticado 'Lito' en referencia a sindicatos y fabricantes, al tiempo que ha anunciado su propósito de pedir responsabilidades.

Sector sensible

Y es que, como así ha insistido el representante de UGT, las nuevas reglas de juego entre concesionarios y fabricantes pueden hacer tambalear a un sector que, pese a ser tan sensible a la crisis económica, ha mostrado hasta el momento un comportamiento "aceptable, bastante mejor de las previsiones iniciales", circunstancia que, sin dudarlo, ha atribuido al enorme esfuerzo que en concepto de ayudas se han destinado a fabricantes y empresas de componentes y, sobre todo, al asumido por los trabajadores para evitar el cierre de plantas.

En este sentido, ha puesto como ejemplo la responsabilidad de los trabajadores de Renault, si bien ha advertido que no sería extraño que saliera ahora a la palestra Jean Pierre Laurent, presidente de la multinacional del rombo en España, para decir que los compromisos adoptados corren peligro.

"Todo lo hecho hasta ahora no puede ser en balde, no podemos poner en riesgo el trabajo de miles de empleados que han realizado un esfuerzo tan grande", ha declarado 'Lito', que por ello reclama un pronunciamiento del Gobierno y de la Junta de Castilla y León.