El centro nace, además, con el objetivo de descubrir a jóvenes investigadores y trasladar los resultados que se obtengan a los pacientes de España y Europa.

Aunque en el CNIC, que depende del Instituto de Salud Carlos III, no se tratará a los enfermos, sí se les harán pruebas en el mismo, explicó el presidente del Comité asesor del CNIC y premio Príncipe de Asturias, el cardiólogo Valentín Fuster, quien comentó que los resultados que se obtengan en la investigación servirán para diagnosticar, pronosticar y prevenir.

"Hemos avanzado muchísimo en la investigación, y es extraordinario... pero hemos fracasado en la prevención de la enfermedad", dijo Fuster en declaraciones a TVE. Además de prevención, el centro se ocupará de la biología del corazón, de cómo regenerarlo cuando está dañado y de conocer más a fondo las enfermedades que sufre, entre otros programas.

La 'excelencia' del centro

El Centro contará con un Comité Científico Externo de Asesoramiento y Evaluación, formado por diez ciéntificos de renombre internacional, otenciará la excelencia del Centro a través de su asesoramiento en materia de política científica y de la evaluación periódica de los planes concretos de docencia e investigación y de sus resultados.

Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la mayor causa de mortalidad en España y generan elevados costes humanos, sociales y económicos.

Más de 60  millones de euros

El Ministerio de Sanidad ha financiado con 60 millones de euros la nueva sede, de 23.000 metros cuadrados, del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).

En el convenio firmado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con las empresas privadas que apoyan este proyecto, se establece la aportación hasta el año 2012 de 266 millones de euros, 166 procedentes de fondos públicos y 100 de las empresas privadas.