El grupo municipal de IU en el Ayuntamiento de Zaragoza exigirá la comparecencia ante la comisión extraordinaria de Economía y Hacienda sobre la gestión de la Expo 2008 del que fuera su presidente, Roque Gistau y del entonces director de Operaciones y Contenidos, Jerónimo Blasco, quien en la actualidad es el consejero municipal de cultura, Medio Ambiente, Grandes Proyectos y Participación Ciudadana.

Para el portavoz del grupo municipal de IU, José Manuel Alonso, "si la comisión especial ha de servir para dirimir responsabilidades, los responsables técnicos de la Expo" en referencia a Gistau y Jerónimo Blasco "han de explicar los motivos que les llevaron a dar por buenas unas fórmulas y herramientas de gestión que hoy el Tribunal de Cuentas pone en tela de juicio".

En este sentido, ha puntualizado que la comisión especial, "no puede ni debe convertirse en la herramienta de defensa de la gestión de la muestra", sino que "ha de servir para determinar las responsabilidades que se derivan del contenido del informe presentado por el Tribunal de Cuentas".

En un comunicado, IU ha señalado que "la concreción y el detalle del informe emitido por el Tribunal de Cuentas es suficientemente concluyente como para entender que el objeto de la comisión especial, ha de ser ágil y servir para dirimir las responsabilidades oportunas de quienes impulsaron y apoyaron que la excepción se convirtiera en normalidad durante la gestión de un proyecto de las dimensiones de la Expo 2008".

Para la formación de izquierdas no se trata de repetir un trabajo que ya ha desarrollado el Tribunal de Cuentas, para acabar cuestionando las conclusiones de este Tribunal, encargado de comprobar si la actividad económico-financiera del sector público respeta los principios de legalidad, eficiencia y economía dentro de su función fiscalizadora, que sería el objeto de esta comisión especial.

En opinión de IU la comisión de este jueves ha de servir para "determinar responsabilidades en base a los contenidos del informe de este órgano público y externo de control y el testimonio del equipo que lideró la gestión".

Además ha mostrado su total convicción en que este informe "nos tiene que servir para descartar esta política de grandes proyectos tal cual se concibe" al argumentar que "desvirtúa las herramientas de gestión pública, imposibilita la participación y el control social y se aleja de las necesidades y problemas reales de la ciudad y de la ciudadanía".