El PPCV va a solicitar la abstención del fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), Ricard Cabedo, y del teniente fiscal de la Comunitat Valenciana, Gonzalo López Ebri, en la causa abierta contra el portavoz socialista en las Corts, Ángel Luna, por exhibir un informe del 'caso Gürtel' bajo secreto sumarial.

Así lo ha anunciado en rueda de prensa el secretario ejecutivo de Política Económica y Empleo del PPCV, José Marí Olano, que ha estado acompañado por la coordinadora del partido, Isabel Bonig, tras las informaciones publicadas por el diario 'ABC', que apuntan a que López Ebri acompañaba a Cabedo cuando se encontró en un restaurante de Valencia con tres miembros de la Brigada de Blanqueo de Capitales, que habían prestado declaración unas horas antes como testigos en el TSJCV, donde negaron que la filtración del informe a Luna procediera de la Policía.

Marí Olano ha destacado que a los 'populares' les consta que, además de "comer bajo el mismo techo que los policías interrogados", Cabedo y López Ebri comentaron "en tono jocoso y de chanza" la declaración que había tenido lugar minutos antes.

Para el secretario ejecutivo de Política Económica y Empleo del PPCV, "la coincidencia del fiscal superior y los policías que acababan de declarar en el mismo restaurante es una cuestión ya de por sí alarmante", pero ha añadido que este sábado se ha conocido que, además, el teniente fiscal "también asistió a esta reunión".

Por ello, ha destacado que el PPCV no sólo va a solicitar, en base al artículo 28 del estatuto orgánico del ministerio fiscal, la abstención del fiscal jefe del TSJCV en la causa abierta contra Luna, sino también la de teniente fiscal. "Este asunto quedaría asumido por otro fiscal distinto respecto al cual no existieran elementos objetivos que hicieran sospechar de su parcialidad", ha añadido.

Jose Mari Olano ha incidido en la "credibilidad" de sus fuentes. "Nuestro testigo nos indica que lo que manifestó Cabedo no responde del todo a la verdad; nos indica que llegaron primero al restaurante el fiscal superior y sus acompañantes y se quedaron fuera esperando durante unos minutos hasta que llegaron los policías", ha asegurado.

Asimismo, ha señalado que aunque "es cierto que el fiscal superior no los conocía personalmente", no lo es que "se limitaran a un saludo protocolario". En este sentido, ha aseverado que "hubo una conversación en la puerta del restaurante en la que se comentó expresamente el contenido de la declaración que había tenido lugar minutos antes en tono jocoso y de chanza como diciendo 'qué listos que somos, que a nosotros no nos pillan'".

"Nos lo confirma una fuente a la que le damos toda la credibilidad, la misma que le damos a las fotografías publicadas", ha recalcado Marí Olano, quien ha destacado: "no afirmo que el fiscal superior mienta, afirmo que yo no le creo porque tengo motivos más que razonables" para no hacerlo.