Abdelwuahab Houzi, imán de la mezquita de la calle del Nord de Lleida, clausurada por el Ayuntamiento en septiembre, ha declarado ante la Fiscalía que ha destinado donaciones de los fieles para construir una mezquita nueva a los gastos de la actual, entre ellos el alquiler, según han confirmado a Europa Press fuentes cercanas a la investigación.

El Ministerio Fiscal abrió una investigación el 21 de diciembre contra el imán, tras recibir una denuncia anónima sobre el destino de las limosnas de los fieles, y en la que el denunciante cifraba en 3.000 euros el coste del alquiler.

Las mismas fuentes apuntan que detrás de la denuncia se encuentra un musulmán que regenta un comercio en Lleida y que donó 6.000 euros, y que molesto por no ver su donación en las aportaciones a la construcción del templo interpuso una denuncia.

El fiscal, que citó al imán el 30 de diciembre, convocará también a otros tres miembros de la asociación que dirige la mezquita, tratándose de la Comunidad Islámica de Cooperación de Lleida y de la comarca del Segrià.

El Ayuntamiento, que en septiembre clausuró el templo por exceso de aforo, cedió a la comunidad en diciembre de 2007 un solar en un polígono para la construcción de una mezquita y poner fin al problema de capacidad de la mezquita y a las protestas vecinales por la ocupación aceras de algunos fieles en la estrecha calle del Nord.

Más de tres años después, el consistorio inició el día 13 el proceso de rescisión del contrato de cesión del solar, dando a la comunidad un plazo de diez días para presentar alegaciones.

Desde que el Ayuntamiento precintó el templo Houzi reza con sus fieles en un aparcamiento del parque Camps Elisis cinco veces al día. El intenso frío está desplazando a algunos de sus seguidores a la otra mezquita de la ciudad, en la calle Clavell.