Los centros vascos podrán acceder a un centenar de testimonios de víctimas y solicitar la presencia de una quincena

Educación ha completado los materiales existentes, que incorporarán además sentencias judiciales
Isabel Celaá presenta los materiales, junto a dos expertos
Isabel Celaá presenta los materiales, junto a dos expertos
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Isabel Celaá presenta los materiales, junto a dos expertos

Los materiales y recursos pedagógicos vinculados al Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia incluyen un centenar de testimonios de víctimas, mientras los centros que lo deseen podrán solicitar la presencia de "catorce o quince víctimas de ideología plural" en las aulas para que relaten sus experiencias.

Estos recursos han sido presentados este miércoles por la consejera de Educación, Universidades e Investigación, Isabel Celaá, junto a los expertos en este área Xabier Etxeberria y Jesús Prieto, en un acto en Bilbao que ha contado con la presencia de representantes de la comunidad educativa, así como de las responsables de las direcciones de Víctimas del Terrorismo y de Víctimas de Violencia de Género, Maixabel Lasa y Mariola Serrano, respectivamente.

Durante su intervención, Celaá ha destacado que la "modernización" de la educación vasca "no tiene sentido" si no se "fundamenta" en valores "respetuosos" con la convivencia democrática y la defensa de los derechos humanos. Asimismo, ha indicado que la reforma del currículum educativo es únicamente "una primera pieza" que requiere además la formación del profesorado y la elaboración de materiales adecuados.

En este sentido, ha apuntado que Educación trabaja "en tres direcciones", entre ellas, la puesta en marcha de cursos de formación y un seminario específico sobre competencia social y ciudadana desde hace dos meses, que cuenta con la participación de 50 centros en sus trabajos y que ha obtenido una valoración "altamente satisfactoria".

También se ha dispuesto el 'Eskola Bakegune', un "espacio físico" y virtual inaugurado hace tres meses y cuya capacidad se ampliará, para orientar al profesorado, que cuenta con 700 recursos bibliográficos, decenas de documentos fílmicos y casi un centenar de testimonios de víctimas.

Además, se han proporcionado materiales específicos para que, en las aulas, pueda darse "un trabajo intensivo" para "procurar la convivencia entre diferentes".

La consejera ha destacado que, con el cambio curricular efectuado, la presencia de las víctimas "adquiere un valor fundamental en el aula por su eficacia educativa" porque, con su relato, "podemos aprender todos y especialmente nuestros jóvenes". De este modo, se ha mostrado convencida de que "la utilización del testimonio de las víctimas sirve para recrear en las mentes de nuestro alumnado una convivencia en paz, respetuosa con los valores de ciudadanía, e inflexible con la vulneración de los derechos humanos".

Celaá ha precisado que los centros podrán solicitar, en un primer momento, la presencia de "catorce o quince víctimas" de ideología "absolutamente plural", que han sido determinadas por la Dirección de Víctimas del Terrorismo.

Además, se dispone de un centenar de testimonios grabados, aunque se ha mostrado convencida de que "habrá más a medida que este material avance y se vaya actualizando, porque afortunadamente los acontecimientos de nuestro país nos permiten pensar que podamos tener amplias orillas para poder incorporar más material y mucha más convivencia respecto a lo que venimos trabajando en la escuela". MATERIALES

Educación ha actualizado, tras un evaluación interna y externa, los materiales 'Bakerako urratsak' e 'Historias que nos marcan', que ha decidido mantener porque "su inspiración era correcta", si bien se ha "mejorado pedagógica y didácticamente" su contenido y se han orientado "más" a la edad a la que se dirigen. En ellos, "lo digital y lo audiovisual cuentan con un mayor peso" y se han enriquecido con testimonios que aportan "mayor capacidad educadora".

Los materiales, que pretenden "educar" a los jóvenes con "una capacidad crítica" para que no se dejen "enredar", ofrecen unos recursos "abiertos" a nuevas incorporaciones a medida que se vayan evaluando, adecuarlos a los objetivos curriculares, incluir más actividades relacionadas con la xenofobia y la violencia de género y ajustarlos al nivel educativo.

También se han incorporado un mayor número de testimonios, 17 de ellos en 'Historias que nos marcan', el doble que en su primera edición, y otros siete en 'Bakerako Urratsak'. Como novedad se recogen además sentencias judiciales para que puedan ser utilizadas como herramienta pedagógica para "el contraste entre testimonios y hechos probados".

Según ha explicado Jesús Prieto, miembro de los servicios de apoyo al profesorado, 'Bakerako urratsak' e 'Historias que nos marcan' incluyen distintas actividades como cine-forum, juegos de rol o un barómetro de valorares, así como testimonios de víctimas o la posibilidad de adquirir un compromiso personal del alumnado.

Xabier Etxeberria, del Aula de Ética de la Universidad de Deusto, ha insistido que el trabajo realizado con estos materiales se enmarca en una iniciativa "estrictamente educativa", dirigida a "alentar una educación para la ciudadanía en la que la presencia de las víctimas es muy relevante".

Según ha apuntado, se ha trabajado con "la tesis" de que sólo si existe una "centralidad" de las víctimas en los procesos de educación para la paz "queda garantizado que es una paz asentada en la justicia y el reconocimiento", así como con la necesidad de dar "la relevancia precisa" a las víctimas del terrorismo "en todo el abanico de posibilidades que ha contemplado el Parlamento vasco" tras el "vacío" que había habido en la escuela, pero sin que esto suponga "el arrinconamiento" de las víctimas de otras "expresiones de violencia" como la de género o de acoso escolar.

También se resalta la deslegitimación del terrorismo "afinando el sentido de la neutralidad" de los educadores, que no debe darse cuando las opiniones de los alumnos "contravienen lo que exigen los derechos humanos".

En cualquier caso, ha indicado que los materiales buscan que las víctimas "estén en el proceso de educación y ayuden a potenciarlo" y su presencia se dé en "un nivel prepartidario", de manera que sean "testigos morales" y no "adoctrinadoras partidistas".

En esta línea, ha precisado que sus relatos, de manera virtual o física, se enmarcan en "diseños pedagógicos completos" teniendo en cuenta "los contextos" de cada centro educativo, porque es necesario que se dé "el clima adecuado" para que su presencia se acoja de "manera empática". ENFRENTAMIENTOS

Preguntada por la posibilidad de que las víctimas puedan verse sometidas a enfrentamientos dialécticos con los alumnos que justifican la violencia, Celaá ha precisado que no se "enfrenta a un caso de violencia del GAL o del terrorismo el primer día de clase" a los alumnos de primaria, sino que "se trata de incorporar un material" tras "una ausencia clamorosa" en "un país que ha sufrido un fenómeno específico de terrorismo de ETA, que al mismo tiempo ha suscitado también otros terrorismos del GAL, del Batallón Vasco-Español o la Triple A".

En este sentido, ha señalado que en el Parlamento vasco ha habido "un acuerdo" de que "el terrorismo debe ser deslegitimado", una labor que en el caso de los jóvenes, "donde puede prender por falta de formación o información cualquier llamada a la violencia", debe hacerse "claramente en la escuela".

Según ha apuntado, se trabajará "de forma modulada" pero "con una idea muy clara: que hay que convivir". En este sentido, ha defendido que "la presencia física de las víctimas, cuyo testimonio es insustituible, ha de hacerse en el momento oportuno, cuando ese centro estime que es adecuado para seguir con la tarea educativa".

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