El informe de la ONU, que todavía no es definitivo, hace hincapié en que los presos sean juzgados o liberados, y que los EE UU se «abstenga de utilizar la tortura».

Los autores del informe han denunciado las trabas que puso el Gobierno de Bush para realizar su labor, motivo por el que declinaron aceptar una visita a Guantánamo propuesta por los EE UU. El Parlamento Europeo debatirá el jueves si pide el fin de estas detenciones: «Las organizaciones humanitarias han denunciado el empeoramiento de la situación de los presos», afirmó ayer la eurodiputada Elena Valenciano.

Un agujero ‘alegal’ en Cuba

La cárcel de Guatánamo fue abierta en una base militar en Cuba en 2001 para internar inicialmente a los presos de la guerra de Afganistán, considerados por EE UU pertenecientes a Al Qaeda o próximos a los talibanes. Pese a que en los últimos años han sido liberados prisioneros, la situación en que se encuentran es alegal, se les considera «presos indefinidos», al margen de los convenios de Ginebra, que regulan el estatus de un prisionero de guerra.

Las dos caras de Guantánamo

Según la ONU...

Torturas: Se practican técnicas de alimentación forzada, actos de torturas contra los detenidos y discriminación en relación a la religión.

Cierre inmediato: Piden cerrar el centro y que se inicie de forma expeditiva un procesamiento judicial o que se los libere.

Tribunal: Demanda la participación de un tribunal internacional competente.

... y para EE UU

No dan crédito: Para los EEUU, todos los informes sobre Guantánamo están basados en habladurías, ya que nadie «ha estado allí».

‘La lucha continúa’: El objetivo de este centro es garantizar que los detenidos no vuelvan a luchar contra los estadounidenses y sus aliados en Afganistán.

Hasta el final: El centro existirá mientras continúe la guerra contra el terror.