Los sindicatos andaluces no descartan una nueva huelga general "si sigue sin haber diálogo social entre Gobierno y sindicatos", ha apuntado el secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, quien al igual que el vicesecretario general de Organización de UGT-A, Francisco Fernández, ha considerado "insuficientes" las nuevas ayudas a la formación dirigida a desempleados sin ingresos.

Ambos dirigentes de CCOO y UGT han participado en una concentración ante la Confederación de Empresarios de Sevilla, en la avenida de República Argentina de la capital, para pedir la reactivación de la negociación colectiva, en el contexto de una jornada convocada por la Confederación Europea de Sindicatos, donde han acudido unos 1.000 delegados sindicales sevillanos, además de trabajadores de diversas empresas, como Pickman, que han roto platos en plena calle y han cortado esta vía.

El secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, ha hecho además un llamamiento a la sociedad andaluza para que "acudan a las ocho manifestaciones en todas las provincias andaluzas" convocadas para este sábado y ha advertido que los sindicatos van a seguir movilizándose.

Carbonero ha indicado que la huelga general "no está descartada" en el caso de que "siga sin haber diálogo social y no se abran vías de comunicación con los sindicatos para una rectificación de la reforma laboral y de la reforma del sistema público de pensiones".

El dirigente sindical ha explicado que el sindicato "ha hecho una apuesta por una importante movilización, que tras la huelga general tuvo un paréntesis para buscar el diálogo social y soluciones, pero el Gobierno sigue siendo un rehén absoluto de los mercados y de la presión de los partidos conservadores de la derecha europea, que tienen intereses absolutamente distintos a los nuestros".

"Es la cobardía de este Gobierno lo que está haciendo que no haya diálogo social y encima se atrevan otra vez a quitarle dinero a los parados", ha agregado Carbonero, quien ha lamentado que el Ejecutivo "ha rebajado la fiscalidad a los empresarios, mientras que los pensionistas siguen teniendo recortes". Asimismo, ha criticado que "quiere jubilar a las personas forzosamente a los 67 años cuando no es capaz de encontrar empleo para los que tienen 30 años, es un despropósito absoluto".

Por su parte, el vicesecretario general de Organización de UGT-A, Francisco Fernández, ha apuntado que el acto de este miércoles "es un toque de atención a los empresarios, porque en Andalucía, a la altura que estamos, ya finalizando el año, hay más de 500 convenios colectivos sin cerrar, de este ejercicio o anteriores".

"Los empresarios están aprovechando la situación que se ha creado con la reforma laboral y queremos, con este acto de protesta, que la patronal asuma sus compromisos, pues todos tenemos que apretarnos el cinturón, pero parece que los empresarios no están dispuestos a ello", ha apuntado Fernández.

Nueva ayuda a desempleados sin prestación

Asimismo, preguntados por la nueva ayuda económica a la formación para parados sin ingresos anunciada por el Gobierno, Carbonero ha considerado que es "absolutamente insuficiente", toda vez que "no cumple los objetivos ni las necesidades que tiene la población" y ha recordado que la pérdida de 426 euros "significa que más de 500.000 personas en marzo van a estar sin cobrar en Andalucía y eso es agravar la ruina que tienen muchísimos trabajadores, que están abocados a la exclusión social".

"El Gobierno no puede decir que dando algunas becas a la formación va a resolver la falta de protección social, eso es engañar a la gente y es insuficiente, aunque compartimos que la formación es básica para salir de la crisis", aseveró Carbonero, quien han lamentado que el Ejecutivo "no ha puesto ningún presupuesto sobre la mesa ni tienen posibilidades de llamar a todos los desempleados para darles formación, pero, para qué van a formarla si no tienen ni diseño del modelo productivo".

El dirigente de CCOO-A ha insistido en reivindicar la protección social y un plan de empleo "con políticas que de verdad sirvan a los trabajadores y eso hoy no es posible si no se garantiza la protección social, al margen de que haya o no formación".

Por su parte, Francisco Fernández advirtió de que "cada vez se le está terminando la prestación a cada vez más trabajadores, por lo que esa nueva ayuda es un error total del Gobierno en línea con lo que viene haciendo los últimos seis meses".

"Querer compensar esa supresión de las ayudas de 426 euros con becas de formación no soluciona el problema que tienen los desempleados, pues la formación se está dando y los trabajadores se están formando y no es necesario cambiar la realidad por una prestación", ha aseverado Fernández, quien también ha apostado por "planes de empleo para contratar a los trabajadores que tengan agotadas las prestaciones" pero ha insistido en que "es un error cambiar esas ayudas por becas de formación".

Reacciones provinciales

Por su parte, el secretario general de UGT Sevilla, Juan Antonio Gilabert, ha criticado que "muchos convenios colectivos en la provincia no se han firmado ni se han cerrado en mesa de negociación, de forma que en Sevilla cerca de 300.000 trabajadores no tienen convenio".

Gilabert ha lamentado que los empresarios "aprovechan la crisis para sacar beneficios" y ha considerado que "es una barbaridad lo que están haciendo, pues las relaciones laborales las quieren llevar al extremo del subdesarrollo y así no van a mejorar la competitividad de sus empresas, desregularizando sus relaciones laborales". "Vamos a seguir luchando para dar un cambio a este modelo que patronal y gobierno nos quieren imponer", ha añadido.

Por su parte, el secretario general de CCOO Sevilla ha lamentado que "más del 60 por ciento de convenios están sin firmar en Sevilla" y también ha lamentado que los empresarios "aprovechan la crisis y las pistas que les da el Gobierno, la patronal está tomando nota y no sabemos cómo vamos a mantener el poder adquisitivo cuando a los empleados públicos les bajan el sueldo".

Ha lamentado que el Gobierno "se ha plegado a los intereses de entidades financieras y de la clase empresarial y las dos últimas medidas anunciadas, la supresión de los 426 euros y la reforma de las pensiones en enero suponen el golpe más brutal a los trabajadores".