La Xunta de Galicia ha lamentado este miércoles los ataques que se han registrado de madrugada en dos oficinas de empleo, una en el barrio vigués de Coia, y otra en O Porriño (Pontevedra), donde fueron arrojados cócteles molotov de fabricación casera, y ha confirmado que la de Vigo permanece cerrada debido a los daños.

La delegada territorial de la Xunta en Vigo, Lucía Molares, y la jefa territorial de la Consellería de Traballo e Benestar, Carmen Bianchi, se han desplazado a las oficinas para comprobar el alcance de los daños.

Así, en el caso del local de O Porriño, situado en el polígono de Torneiros, y que fue atacado con un cóctel molotov, los daños se limitaron a la pérdida de documentos que estaban en las bandejas de las mesas —contratos, prórrogas y diversa documentación—, pero las instalaciones están operativas.

Sin embargo, en la oficina del Servizo Galego de Colocación de la calle Baiona, en el barrio vigués de Coia, que fue atacada de madrugada con piedras y dos artefactos incendiarios, se registró un incendio que dañó mobiliario y equipo informático, por lo que permanece cerrada y los usuarios han sido desviados a otros puntos de la red de colocación y empleo.

Recuperar la normalidad

Según ha explicado la delegada territorial, tras la toma de muestras por parte de la Policía Científica, diversos operarios iniciaron las labores de limpieza y reparación de los destrozos, con el fin de que este jueves esa oficina "pueda funcionar con total normalidad".

La Consellería de Traballo e Benestar ha presentado denuncia ante las autoridades competentes por estos hechos, y ha ofrecido su colaboración a la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra para esclarecer la autoría y las circunstancias de estos ataques.