El Ayuntamiento de Calatayud (Zaragoza) ha dado el visto bueno a la regulación de los trabajos comunitarios que se pueden realizar en sustitución de las sanciones económicas por infringir la ordenanza municipal de medio ambiente en lo que se refiere a la práctica del botellón y a la conservación de mobiliario urbano y de zonas verdes.

Esto se traduce en una relación de equivalencia entre la multa económica y el número de horas de servicios comunitarios establecida en función de la gravedad de la infracción, ha informado el Ayuntamiento de Calatayud en un comunicado.

El concejal de Medio Ambiente del consistorio bilbilitano, Miguel Lavilla, ha explicado que el acuerdo responde a la necesidad de ajustar esta opción a la realidad actual porque hasta ahora sólo se pedían cuatro horas de trabajos comunitarios en una única jornada sin tener en cuenta el tipo de infracción, su gravedad o situaciones de reincidencia.

En cuanto a la cuantificación de horas, se establecen las mismas categorías que para las sanciones económicas, tres en función de la gravedad. La cuantía de las multas oscila entre los 30 y los 1.803 euros y su equivalencia en trabajos a la comunidad pasará a oscilar entre las cuatro y las 64 horas, es decir un mínimo de una jornada o un máximo de 16.

También se han ampliado el tipo de trabajos que se pueden desempeñar, con la limpieza de chicles del suelo y la retirada de carteles pegados en el mobiliario urbano y en muros y fachadas de inmuebles.

Los trabajos se seguirán desempeñando los fines de semana, de 9.00 a 13.00 horas, bajo la supervisión de un empleado de FCC, con especial atención a la limpieza de aquellas zonas de concentración de botellón, como son los parques de La Serna, La Redonda, Margarita, San Antonio y los dos senderos verdes.

Hasta ahora, y desde que empezó aplicar la normativa, en 2009, han sido 21 personas las que han preferido realizar trabajos comunitarios a pagar la multa económica a pesar de que, en la mayoría de los casos, eran sanciones leves valoradas en 38 euros.