Durante el año 2009 no se registraron incidentes que obligaran a activar el Plan de Emergencia Interior del Puerto de Santander. Únicamente se registró algún suceso que obligó a la Autoridad Portuaria a adoptar medidas preventivas.

Así consta en la memoria anual del puerto cántabro, consultada por Europa Press, que explica que dichas medidas fueron adoptadas en previsión de que la evolución de dichos sucesos hicieran necesario finalmente la activación del Plan de Emergencia Interior.

En concreto, los incidentes que obligaron a establecer a la Autoridad Portuaria de Santander medidas preventivas fueron dos, y ocurrieron en los meses de marzo y septiembre.

El primero de ellos sucedió el 2 de marzo, cuando se produjo la autocombustión de una parva de carbón, ante lo cual, los grupos de intervención definidos en el Plan de Emergencia Interior del Puerto de Santander se pusieron en estado de preemergencia ante la posibilidad de tener que cooperar con el personal de la instalación donde se encontraba el carbón almacenado.

El segundo suceso tuvo lugar el 24 de septiembre, cuando se detectó que el prerreducido transportado en una de las bodegas de un buque tenía un foco de calor de entre 300 y 400 grados.

Ante dicha situación, la Autoridad Portuaria estableció medidas preventivas para eliminar el foco de calor, manteniendo a los equipos de emergencias en situación de alerta, ante la posibilidad de tener que intervenir.

Por otro lado, el Puerto de Santander desarrolló durante el año 2009 varios simulacros de emergencias, en los que se analizaron los tiempos de intervención (evacuación); el funcionamiento de los equipos de detección de incendios; las vías de evacuación; o tiempos de respuesta de los equipos de intervención.