Este viernes otro frente frío atravesará la Península. Lo hará de sureste a Baleares y de forma rápida, dejando chubascos localmente moderados y ocasionalmente acompañados de tormentas. Galicia y luego el centro del país notarán más que nadie este 'temporal de un día'.

Hasta 23 provincias estarán en alerta amarilla mientras que otras seis (Guadalajara, Navarra, Guipúzcoa, Vizcaya, Cantabria y Asturias) tendrán activada la alerta naranja de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La nieve es la que causará más problemas, como en estos días pasados, ya que se prevén nevadas en cotas de 200/500 metros en el norte, de 500 a 700 en el centro y de 800 a 1000 metros en el sur.

Lo peor será por la mañana. Ya por la tarde, habrá tiempo estable en gran parte del país, con precipitaciones débiles o localmente moderadas en el extremo norte peninsular, en Baleares y en las islas occidentales de Canarias a últimas horas.

Se producirán, además, heladas generalizadas en el interior peninsular, probablemente moderadas. También soplará viento del noroeste moderado con intervalos de fuerte en el cantábrico oriental, noreste peninsular, litoral andaluz y Baleares. Las temperaturas irán en ligero descenso en el cuadrante sureste peninsular y sin cambios en el resto.

El portavoz de Aemet, Ángel Rivera, ha destacado la caída de los termómetros que se producirá entre el viernes y el sábado "porque el viento se encalma", por lo que se registrarán "las mayores heladas de toda la semana", con valores de 9 a 11 grados bajo cero y serán muy normales termómetros con -4 o -5 grados centígrados en el interior. "La madrugada del sábado va a ser muy fría", ha apostillado.

Ya para el puente, la Aemet prevé más nevadas tras tener el sábado como un día de transición. Y es que una nueva borrasca atlántica se desplazará de oeste a este por la Península y Canarias dando lugar a precipitaciones generalizadas, más frecuentes e intensas en la vertiente atlántica peninsular y más débiles y ocasionales en el área mediterránea.

Las temperaturas ascenderán notablemente durante el domingo y lunes, de forma generalizada, desapareciendo las heladas en gran parte de la Península gracias a una masa de aire subtropical que empezará a influir en la Península. Entre la máxima del sábado y las máximas del lunes podrían subir hasta siete grados centígrados la temperatura.

Pero estas "temperaturas casi primaverales", en algunas zonas del sureste peninsular se alcanzarán hasta 22 grados centígrados, harán que se produzca un ambiente "húmedo pero templado", puesto que los termómetros estarán por encima de los valores normales para esta época de diciembre.

Las precipitaciones, asociadas a la profunda borrasca atlántica, se desplazarán de oeste a este por la Península y Canarias y serán más frecuentes e intensas en la vertiente atlántica peninsular y más débiles y ocasionales en el área mediterránea.

La cota de nieve se situará en torno a 800 metros en el noroeste peninsular a primeras horas del domingo subiendo a cotas altas los días siguientes. El viento será, en general de componente Sur, moderado a fuerte en la mitad oeste peninsular y Canarias, con intervalos de muy fuerte en el litoral gallego y zonas de Canarias.