Entre 1991 y 2001 (último año del que se tienen datos concretos), el número de parejas con hijos cayó casi un 7%. En ese mismo periodo de tiempo, las madres solas con hijos aumentaron un 33,9% y los padres, un 51,2%. La tendencia es, además, creciente y presagia la desaparición progresiva de la familia tradicional.

De hecho, los núcleos sin hijos suponen ya un tercio del total y en una década han crecido un 12%, mientras que las familias con hijos han caído un 0,5%.

Aumentan los divorcios

El aumento de las familias monoparentales tiene relación con el incremento de las separaciones. En diez años, el número de personas divorciadas se ha triplicado (las rupturas aumentan un 25% desde 1999), mientras el de casados no ha variado.

Sin embargo, la natalidad, lejos de continuar cayendo (disminuye desde 1964), comienza a registrar un ligero repunte.

En los noventa, la media estaba en 9.500 nacimientos al año. En el primer lustro del siglo xxi, el número de alumbramientos anuales se sitúa ya en 10.590. La recuperación se debe principalmente a las madres extranjeras. Sólo en 2004 dieron a luz al 14% de los nacidos en Aragón.

Ellos se casan a los 32, ellas a los 29

El matrimonio sigue siendo la forma de unión más común, aunque los aragoneses se casan cada vez más tarde. Entre 1999 y 2003, la edad media aumentó de 28,9 a 29,7 años en las mujeres y de 31,5 a 32,5 en los varones. Por su parte, las parejas de hecho aumentaron del 1,5% en 1991 al 4,3% en 2001. El 42% de los que eligen esta forma de unión tiene algún hijo.

Francisco J. Rodríguez. Sociólogo.

«La variedad de formas de convivir es positiva»

La sociedad se transforma y con ella cambian los hábitos de vida y la convivencia. Para el sociólogo Francisco Javier Rodríguez, es una de las múltiples causas que explica la transformación de la familia.

¿A qué se deben los cambios?

Hay varios factores. Por un lado, ha habido un cambio notable con la incorporación de la mujer al mundo laboral. Su papel tradicional en el hogar está cambiando. También ha variado el modo de pensar de hombres y mujeres. El modelo de familia cambia porque es un reflejo de la sociedad.

¿Damos entonces menos valor al matrimonio?

Todo lo contrario. Aunque no se pase por la vicaría, aumentan las parejas. Por ejemplo, hoy en día es más fácil que alguien reconstruya su convivencia tras separarse.

¿Cómo será la sociedad del futuro?

Nos dirigimos hacia una sociedad con una mayor diversidad de formas de covivencia. Esto es positivo y refuerza a la familia.

Bio

Tiene 55 años. Es decano del Colegio Aragonés de Doctores y Licenciados en Ciencias Políticas y Sociología.