Centenares de pasajeros afectados por retrasos y cancelaciones se han congregado este jueves en el aeropuerto de Santiago para reclamar por los problemas en sus vuelos y criticar la "falta de información" que sufren.

Así, los paros en la actividad de los controladores aéreos han provocado a lo largo de este jueves numerosos retrasos, de hasta cinco horas, y la cancelación de varios vuelos, que han dejado en tierra a numerosas personas.

En concreto, los afectados por los vuelos cancelados se han congregado sobre todo ante las oficinas de Ryanair, que ha suspendido algunos de sus vuelos por la imposibilidad de las aeronaves que debían aterrizar en Lavacolla de tomar tierra para emprender la ruta de regreso.

Estos pasajeros se mostraron, en declaraciones a Europa Press molestos por la "falta de información" acerca de la situación de sus vuelos y las alternativas que se les presentan tras la cancelación de los mismos. La mayor parte de los pasajeros reclamaban en las ventanillas de información la devolución del importe del vuelo o información de si saldrían a última hora, mientras que en el caso de querer cambiar el día, la compañía no podía ofrecerles plaza en algunos destinos hasta el 11 de diciembre.

La situación era complicada sobre todo para las numerosas personas que debían viajar a la capital española para asistir a reuniones y que no han podido hacerlo, así como para aquellas que tenían enlaces hacia otros lugares. Este es el caso de una mujer que debía viajar a Londres para coger allí un enlace con Singapur que, finalmente, no sabe si perderá por la imposibilidad de encontrar plaza en otro vuelo. RETRASOS

Frente a los vuelos cancelados, los pasajeros se han sentido "impotentes" al ver, pasadas las 13.00 horas, despegar algunas aeronaves, como es el caso de tres vuelos de Iberia —alguno de ellos con cinco horas de retraso—, mientras que sus rutas continuaban canceladas.

Al mismo tiempo, las personas afectadas por retrasos también han sufrido complicaciones. El vuelo que debía partir a primera hora de la mañana con destino Madrid fue en un primer momento embarcado y, tras 45 minutos, desembarcado al no poder despegar. Pasadas las 12.00 horas los pasajeros que no se habían ido han vuelto a entrar en la aeronave.

A pesar de que los ánimos de los pasajeros eran tranquilos, ha sido patente la presencia en Lavacolla de numerosos efectivos de Policía para controlar que no se produjese ninguna incidencia en las largas colas ante las ventanillas de las aerolíneas.

Cancelaciones políticas y culturales

Los problemas en los vuelos —principalmente en los enlaces con Madrid— han provocado asimismo cancelaciones y modificaciones en actos políticos y culturales en Galicia.

En concreto, se ha visto cancelada la Comisión Técnica de Seguimiento del Pacto do Obradoiro, que estaba prevista para este jueves y no ha podido celebrarse al no llegar los representantes del Ministerio de Fomento. En la misma línea, la rueda de prensa del director Miguel Ángel Vivas para la presentación de 'Secuestrados' dentro de Cineuropa ha tenido que ser aplazada hasta la tarde y la conferencia de Mónica Threlfall en el Consello da Cultura Galega también ha sido suspendida.

Por otra parte, el ex ministro de Cultura César Antonio Molina, que el miércoles tuvo que aplazar una conferencia en la Cidade da Cultura a causa del retraso del vuelo que lo traía de Madrid, esperaba este jueves en Lavacolla a la salida del avión que lo llevase de vuelta a la capital, también afectado por un retraso.