Cercle Obert de Benicalap considera que debe aplazarse la entrada en vigor de la nueva Ordenanza de Circulación, mientras no exista una "definitiva y completa" red integral de carriles bicis, así como suficientes aparcamientos públicos en todas las calles, plazas y avenidas.

La entidad cívica, en un comunicado, ha explicado que a ningún usuario de bicicletas "le interesa o le gusta ir por las aceras, pero menos le gusta ser atropellado por un camión o un turismo". A juicio del colectivo, "debe terminarse la red de carriles bicis, a la vez que se construyen los necesarios aparcamientos públicos, con objeto de que los usuarios puedan depositar correctamente sus vehículos".

Cercle Obert de Benicalap considera "injusto" que el Ayuntamiento "sancione y se apropie de bicicletas atadas o encadenadas a árboles, farolas, verjas u otros elementos del mobiliario urbano privado o público".

Así, la entidad considera que antes de poner en vigor cualquier norma sancionadora contra los usuarios de bicicletas, la corporación local "deberá haber instalado suficientes aparcamientos públicos de bicicletas en todos las calles, avenidas, plazas de la ciudad, a la vez que completa la inconexa y caótica red de carriles bicis".

"Emprender campañas educativas a favor del transporte alternativo y público, es una obligación urgente de las instituciones, deber que no han desarrollado adecuadamente el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat Valenciana", ha criticado.

Cercle Obert se opone a que la Policía Local de Valencia proceda a la "apropiación indebida" de bicicletas atadas a árboles, farolas o verjas, considerando que la medida es "ilegal", dado que la corporación local "no ha habilitado ni creado suficientes aparcamientos públicos para bicicletas".

En esta línea, ha hecho hincapié en que "mientras no existan esos aparcamientos, la corporación local no puede ni debe apropiarse indebidamente de ninguna bicicleta, estando obligado a devolver todas aquellas que ha incautado ilegalmente, anulando las sanciones impuestas hasta la fecha".

La entidad ha tildado de "improcedente y fuera de lugar" las medidas "coercitivas y sancionadas" que quiere imponer el Ayuntamiento y, al respecto, ha asegurado que "no hay ninguna voluntad ni interés de favorecer el transporte público y hacer digna y habitable la convivencia en la ciudad, a pesar del clima benigno y las excelentes condiciones del terreno".

"Perseguir y criminalizar a los escasos usuarios de bicicletas en una ciudad como Valencia, que nunca se ha tomado en serio favorecer con rigor y pasión el uso de transportes alternativos, es una medida absurda, además de totalmente desproporcionada", ha criticado Cercle Obert, quien ha añadido que la cuantía de las multas son "totalmente disparatadas" y lograrán que "muchos usuarios eviten usar la bicicleta" en sus traslados habituales.

Consulta al síndic de greuges

La entidad ha solicitado el concurso del Síndic de Greuges para que "medie" y "proceda a recordar a la corporación local valenciana, la necesidad de impulsar campañas en favor del uso diario de la bicicleta, dada las magníficas condiciones climatológicas y geográficas que tiene la ciudad de Valencia".