Un trabajador de una cafetería de la capital hispalense ha aceptado dos años y nueve meses de cárcel por adueñarse de dos talonarios propiedad de su jefe e imitar la firma de éste para cobrar 2.436 euros en cheques, hechos por los que la Fiscalía solicitaba inicialmente cinco años y seis meses de prisión.

Fuentes judiciales han informado a Europa Press de que la vista oral tenía prevista su celebración este miércoles en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla, pero finalmente no llegó a celebrarse tras el acuerdo alcanzado entre las distintas partes personadas en este procedimiento, por el cual el imputado acepta dos años y nueve meses de cárcel.

En este sentido, las mismas fuentes han precisado que el acusado, identificado como J.V.G., ha aceptado un año y nueve meses de prisión y el pago de una multa de 810 euros por un delito continuado de falsedad en documento mercantil; un año y 540 euros por el delito continuado de estafa; 90 euros por una falta de hurto, y el pago de una indemnización de 2.436,60 euros al propietario de la cafetería.

Según relata el Ministerio Público en su escrito de acusación, consultado por Europa Press, a finales de marzo o principios de abril de 2008 el acusado, J.V.G., "aprovechando que prestaba servicios como camarero" en un establecimiento de la capital hispalense se adueñó de dos talonarios propiedad del dueño de la cafetería.

De esta manera, y según indica el fiscal, el imputado, "guiado por el propósito de obtener un inmediato beneficio económico, imitó la firma de su jefe, rellenó el importe y cobro al portador de ocho cheques" y, posteriormente, acudió a distintas oficinas bancarias y obtuvo 2.436 euros en metálico.

Por todo ello, el fiscal solicitaba inicialmente para el encartado dos años de cárcel y el pago de 900 euros por un delito continuado de falsedad en documento mercantil, así como tres años y seis meses de prisión y 900 euros de multa por un delito continuado de estafa cualificada.