El vicepresidente de la patronal Ceoe-Cepyme Cantabria, Alfredo Salcines, ha achacado la destrucción "masiva" de empleo" a la "rigidez" de las relaciones labores, que ha provocado que se carezca de "instrumentos empresarialmente eficaces".

"Se sigue echando de menos una perspectiva más amplia y equilibrada del Derecho del Trabajo, que no contemple solo o exclusivamente derechos y garantías del trabajador, sino también que sea el marco regulador de la promoción de la eficiencia organizativa empresarial, que nos permita incrementar la competitividad, única manera de crear empleo", ha señalado.

Salcines se ha expresado así en un encuentro ante 200 empresarios organizado por Ceoe, en el que se ha analizado la reforma laboral, y que ha contado con la colaboración de AEDIPE y la Asociación para el Progreso de la Dirección, representados por su presidente, Alfonso de la Mora y por el Director Comercial de la Zona Norte de APD, David Martinez.

El vicepresidente de la patronal abrió la jornada, en la que participó Cesar Tolosa, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria y Ramón Gimeno Lahoz, magistrado juez del Juzgado número 5 de Santander.

Por su parte, Carlos García Barcala, socio del área laboral del despacho Garrigues de Oviedo, expuso desde el punto de vista de la gestión, los pormenores relativos a Contratación temporal o indefinida, modificación de las condiciones sustanciales del contrato y las reformas esenciales en el marco regulador de la flexibilidad interna, sobre todo en relación con la modificación de condiciones reguladas en convenios colectivos estatutarios.

Salcines explicó que "la reforma laboral se propone corregir o evitar la dualidad entre contratos temporales e indefinidos". "La estrategia interna es evidente: pasa por encarecer la temporalidad para que no sea la primera opción en contratación", ha considerado.

Según ha dicho, "la tímida reforma de la intermediación laboral está pendiente de desarrollo reglamentario y sólo se podrá valorar empresarial y técnicamente cuando finalice este proceso, aunque la vía iniciada en la Ley es claramente insuficiente".

Salcines ha afirmado que "el despido objetivo por causas empresariales es el único método que tiene todas aquellas empresas que cuentan con hasta cinco trabajadores, lo que supone ser el procedimiento para el 81 % del tejido empresarial en Cantabria, y algo similar en España".

El vicepresidente de la patronal cántabra citó como último factor la búsqueda de la "adaptabilidad" a la realidad económica de la empresa y su empleo, a través de las modificaciones efectuadas en el art. 41, es decir a través de la flexibilidad interna de las empresas.

"Si las empresas para readaptar sus recursos debían utilizar instrumentos que han resultado tan inadecuados como los establecidos, era evidente que por otro lado tenía que conseguirse flexibilidad", ha subrayado.

Según el representante empresarial, "pese a la polvareda mediática que se ha levantado con el coste del despido, la flexibilidad interna ha sido una de las materias que más nos han interesado y que con mayor frustración se contempla".

"Tener una visión unilateral o reduccionista de las relaciones de trabajo, aumentado o promoviendo sólo el lado de las garantías o tutelas, implica seguir haciendo una lectura antagonista de intereses, provocando una desconexión entre empresa y trabajador, que no debería existir si lo que pretendemos es empleo de calidad", ha finalizado.