Nazarenos revueltos

El estado por el que pasan algunas cofradías de Málaga no parece muy halagüeño.
Tanto es así que estas entidades, que deberían dar ejemplo de civismo y buenas relaciones entre quienes las integran, llegan a enfrentamientos que dejan mucho que desear.Éste es el caso de la Hermandad de la Sentencia, que   hasta mayo no sabrá el grupo de personas que la regirán. Tras las destituciones de 22 miembros del actual equipo de gobierno decididas por el hermano mayor de esta cofradía, el Obispado pretende intervenir constituyendo una junta rectora (integrada por hermanos de la cofradía) o una junta gestora (formada por algún cargo de la Diócesis).

No hará falta llegar a este extremo si entre los hermanos se alcanza un acuerdo y resulta una sola candidatura –que no deje fuera a nadie– tras la Semana Santa. La mediación del obispo en estas disputas no es ninguna novedad, pues en la reciente historia de nuestra Semana Mayor hay varios casos documentados.

En Zamarrilla, la fraternidad tampoco se corresponde con la definición del diccionario. Según ha trascendido recientemente, la nueva junta rectora inicia un camino de concordia. Cerrar fisuras puede suponer años. Algo penoso para esta cofradía señera, que realiza su salida el Jueves Santo.

Donde también parece que las aguas bajan revueltas es en la archicofradía de la Sangre. Las dos candidaturas que se presentarán a las inminentes elecciones han puesto los nervios a flor de piel de más de uno: el actual hermano mayor, Antonio Iranzo, ha expresado su deseo de prolongar su mandato. Frente a él, Antonio Luis Villanúa opta a ser elegido para asumir el cargo durante los próximos años.

Lo que más llama la atención es la edad de los hermanos que acompañan a Villanúa. Esto no debería sorprender: la juventud ha de recoger el testigo de la tradición para mantener viva la Semana Santa.

Dinos...

... si crees que el Obispado debe intervenir en las cofradías.

nosevendemalaga@20minutos.es

Mostrar comentarios

Códigos Descuento