El proyecto de Ley de Comercio de Galicia inicia este martes su tramitación parlamentaria tras rechazar los diputados del PPdeG su devolución al Gobierno como solicitaba el BNG, muy crítico, al igual que los socialistas, con un texto que introduce "elementos discrecionales" y que, si no se modifica, "significará la pérdida de 22 años" para el sector, es decir, un "retroceso".

Así lo ha manifestado el portavoz del BNG en el debate, Henrique Viéitez, quien ha subrayado que la distribución comercial queda "en manos de los ayuntamientos", que "discrecionalmente" podrán determinar si la implantación de una superficie comercial que no sea superior a los 2.500 metros cuadrados "tiene o no incidencia supramunicipal".

Por ello, el nacionalista ha instado a la Xunta a reconsiderar su posición sobre un proyecto de ley que "renuncia expresamente" a regular la implantación de las grandes superficies, al plan sectorial de equipamientos comerciales y a usar el gallego como "elemento diferenciador y de valor añadido", además de "banalizar" las mesas locales.

En la misma línea se ha pronunciado la diputada socialista María Quintas, quien ha reprobado la "tramitación oscura" de la norma por parte de la Xunta, antes de reprobar el trato que da la Xunta al sector del comercio en los presupuestos para 2011. Según denunció, desde que Alberto Núñez Feijóo tomó las riendas de la Xunta, el apoyo a los comerciantes "se redujo a la mitad" y ahora impulsa una ley "confusa" como avala, ha señalado, la Asesoría Jurídica de la Xunta.

"Usted y Feijóo representan a un gobierno fracasado, ineficaz y demagógico", ha espetado Quintas al conselleiro de Economía, Javier Guerra, quien defendió de forma contundente la ley de comercio en su intervención por considerar que no sólo servirá para "modernizar" todo el sector "desde el diálogo", sino que "garantiza la libertad lingüística" a la hora de rotular los establecimientos.

En su intervención, Guerra ha mantenido que la nueva ley apoyará el trabajo de los 45.000 comerciantes gallegos que "abren las puertas" con su esfuerzo "todos los días", generando 110.000 puestos de trabajo y realizando una actividad que representa más del 30 por ciento del tejido empresarial y el 10,12 por ciento del PIB gallego.

Por su parte, la diputada del PPdeG Cristina Romero también ha defendido la norma y ha coincidido con el conselleiro en que se trata de un proyecto "altamente participativo y consensuado", que "ordena y equilibra el sector", al tiempo que "no invade las competencias municipales" como sí hacía, en su opinión, el texto impulsado por el anterior Gobierno bipartito.

Incidencia supramunicipal y 'OUTLETS'

Como ya se había avanzado, la nueva ley establecerá la necesidad de autorización autonómica sólo en supuestos de incidencia supramunicipal para aquellos establecimientos individuales o colectivos que tengan una superficie útil de exposición y venta al público superior a los 2.500 metros cuadrados.

Con este punto, criticado por la oposición, la Xunta confía en "conectar" el respeto al interés general, de forma que sea posible "compatibilizar" la libertad de apertura con un "adecuado ordenamiento" del territorio, con el "respeto a la autonomía local" en los otros supuestos y con la simplificación administrativa.

Esta ley servirá también para definir y ordenar figuras comerciales recientes como los centros comerciales abiertos, la figura de los 'outlets' —que, según avanzó el conselleiro, se verán obligados "en determinados casos" a fijar "una reducción mínima del 30 por ciento"— y las ferias de oportunidades.

Libertad idiomática y rebajas

Según ha destacado Guerra, en el articulado se recoge la libertad absoluta en el uso del idioma, "tal y como expone el Estatuto de Autonomía de Galicia", y apuesta por crear nuevos órganos con el objetivo de alcanzar una "mayor racionalización administrativa" para alcanzar "mayores niveles de eficiencia".

También ha incidido en que el nuevo texto aspira a regular la creación de un Observatorio del Comercio Gallego configurado como un órgano asesor, consultivo, de estudio y formación en materia de comercio, y la puesta en marcha de Mesas Locales de Comercio como órganos de participación del sector en el ámbito local, "ampliamente demandadas por el sector", pese a que Viéitez ha subrayado que estas mesas "no constituyen novedad alguna".

En lo que respecta a la participación y para continuar con el diálogo, el conselleiro ha destacado la creación del Consejo Gallego de Comercio, en el que estarán representados todos los sectores comerciales y el Registro Gallego de Comercio, que permitirá contar "con un censo actualizado, en colaboración con los ayuntamientos y con los propios comerciantes, para tener un mapa real de la estructura y desarrollo de la actividad comercial en Galicia.

Por último, la nueva ley regula las promociones en general y las rebajas en particular al "prohibir" la realización de cualquier tipo de práctica promocional un mes antes del inicio de las mismas.