Murcia acogió este fin de semana el II Encuentro Nacional de Hermandades y Cofradías de Jesús Caído, que comenzó el viernes por la tarde con una recepción en el Palacio Episcopal de Murcia, acompañada por la Coral Discantus de Murcia y el Grupo de Cámara de la Orquesta Sinfónica de Jumilla.

El presidente de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús, Rafael Cebrián, comunicó que el acto "pretendían ser unas jornadas de oración", motivo por el que resaltó "que su eficacia pone de manifiesto la necesidad no sólo de que salgamos a la calle, sino de orar juntos", según informaron fuentes del Obispado de la Diócesis de Cartagena en un comunicado.

El obispo de la Diócesis, monseñor José Manuel Lorca Planes agradeció a los cofrades el esfuerzo que realizan "por sacar a la calle el misterio de la fe", y destacó "el rico patrimonio que alberga la ciudad de Murcia que, en lo más hondo de su ser, tiene un espacio muy especial nuestro señor".

El sábado por la mañana, el delegado Episcopal de Hermandades y Cofradías, Silvestre del Amor, celebró una misa en la iglesia de Jesús antes de comenzar la Jornada. La ponencia de este día estuvo a cargo del delegado Episcopal de Caridad y Pastoral Universitaria, mientras que la conferencia de la tarde tuvo lugar en la iglesia de San Juan de Dios, a cargo del padre José Luis Parada.

La clausura de este Congreso se celebró este domingo por la mañana, con una Eucaristía en la iglesia de Jesús, presidida por el obispo, en la que intervino la Capilla de Canto de la Cofradía de Jesús de Murcia. Un concierto de Marchas Pasionarias de la Agrupación Musical Juvenil Cabezo de Torres fue el broche final a este Encuentro Nacional de Jesús Caído.