El pleno del Consell de Mallorca ha aprobado, con la abstención de PP y UM, la tramitación inicial de la nueva tarifa de tratamiento de residuos urbanos de 2011, que contempla una subida de un 0,22 por ciento, es decir, un incremento por tonelada de 29 céntimos, lo que supone una estimación de 131,5 euros por tonelada.

Sin embargo, éste es sólo el primer trámite para conseguir la aprobación definitiva de la tarifa, ya que en breve la consellera insular de Medio ambiente, Marilena Tugores, convocará la comisión de residuos a fin de alcanzar un consenso y lograr la aprobación efectiva.

En el caso del PP, se ha ofrecido a fin de conseguir que esta aprobación inicial de tarifa se convierta en menos de mes y medio en una aprobación definitiva. En este contexto, los 'populares' se han comprometido a presentar alternativas y propuestas en el próximo encuentro de la comisión de residuos, mientras que la consellera ha aceptado la propuesta del partido de la oposición.

Tal y como han destacado desde la Institución Insular, desde el Departamento de Medio ambiente y la empresa Tirme se ha realizado un esfuerzo de gestión a fin de actualizar la tarifa y regularizar la tasa de tratamiento de residuos. Tal y como se contempla en el contrato entre el Consell y Tirme, ambas partes y de común acuerdo presentaron una previsión de cálculo de la tarifa del servicio público para el año siguiente.

De este modo, la previsión se ha hecho con los plazos previstos y con los datos correspondientes desde el 1 de junio del año anterior hasta el 31 de mayo del año en curso, mientras que en el ejercicio anterior no se llevó a cabo la revisión y hubo una congelación de tarifa.

En concreto, para calcular la tarifa de 2011 se hace una previsión de toneladas que se tratarán entre el 1 de junio de 2010 y el 1 de junio de 2011 con los diferentes sistemas de tratamiento. Por otro lado se regulariza el coste de tratamiento, con datos reales, de las toneladas tratadas en los dos ejercicios anteriores.

De la cifra resultante, combinada con datos económicos como el IPC, el Euribor y el precio de los carburantes, entro otros, da como resultado la tarifa que propone el Consell y a la que el pleno ha dado luz verde.