La cónsul venezolana en Bilbao, Yolanda Rojas, ha afirmado que el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, ha rechazado "una invitación que el embajador jamás le ha hecho" y ha destacado que las críticas del político vasco se han producido "dos días después de la democrática jornada electoral" que se desarrolló en este país.

Rojas se ha pronunciado de esta manera en relación a las manifestaciones realizadas este pasado martes por el presidente del PP vasco, en las que mandaba "a paseo" al embajador de Venezuela, tras conocer que el eurodiputado del PP Carlos Iturgaiz había sido detenido durante hora y media en el Aeropuerto de Caracas, y calificaba de "impresentable" lo sucedido "en un país que se quiere decir democrático y que lo que hace es retratar a Chaves y su Gobierno".

En un escrito titulado 'Tarjeta roja para Basagoiti', la cónsul venezolana asegura que "en ningún momento" se ha solicitado un encuentro con Antonio Basagoiti por parte del embajador en España, que sí realizará una visita oficial a Euskadi a mediados de octubre.

En este sentido, ha indicado que el político vasco "rechaza una invitación que el embajador de la República Bolivariana de Venezuela no le ha hecho" y ha explicado que, a mediados de septiembre, se le informó desde el consulado de que se estaba preparando una visita del embajador y se le planteaba que "podríamos incluirlo en la agenda en determinado día y hora, si le interesaba".

"Es obvio que no fue de su interés porque no respondió y, por ello, no fue incluido en la agenda preparatoria", que posteriormente fue remitida a la embajada para su "ulterior decisión", ha indicado la cónsul.

Asimismo, ha censurado que "lo más grave es que Basagoiti formula sus declaraciones dos días después de la hermosa y democrática jornada electoral en mi país".

A su entender, "no es casualidad que (Gustavo) Aristegui se haya ido dos días antes de nuestro proceso electoral a insultarlo y a calumniarlo, tal como lo hace periódicamente desde el Parlamento Español en su carácter de vocero del PP, como tampoco fueron casualidades las visitas que los golpistas venezolanos del 2002 realizaran a España".