El presidente de la Junta, José María Barreda, ha anunciado que se impulsará el uso de la biomasa en la región para el suministro de calefacción y agua sanitaria para los edificios públicos. Así, ha asegurado que éste será el sistema energético de los nuevos hospitales universitarios de Toledo, Guadalajara y Cuenca.

En el Debate del Estado de la Región que se celebra en las Cortes regionales, Barreda ha dicho que en el próximo Plan Eólico de Castilla-La Mancha se primarán los planes industriales de las empresas que contemplen la valorización energética de la biomasa forestal y de cultivos energéticos, en colaboración con agricultores y comunidades de regantes.

Se trata, según ha manifestado, de "devolver la rentabilidad" al patrimonio forestal de la región que tuvo hace décadas, pero eso sí, "orientada hacia las energías renovables", asegurando que los cultivos energéticos servirán para la prevención de incendios.

Por ello, ha indicado que el impulso al uso de la biomasa como fuente de energía partirá de la Administración regional, de modo que el suministro de calefacción y agua sanitaria de los nuevos hospitales universitarios de Toledo, Guadalajara y Cuenca se basará en "energía de biomasa procedentes de los montes de la comunidad autónoma".

Por otra parte, tras hacer hincapié en la importancia del campo para Castilla-La Mancha, ha anunciado que se creará un fondo para la mejora de la competitividad de las cooperativas agroalimentarias en la nueva Ley de Cooperativas que prepara el Gobierno regional, con el fin de aumentar la rentabilidad de las explotaciones.

En este contexto, el presidente de la Junta ha señalado que ya está trabajando con el sector vitivinícola para realizar un plan estratégico del sector que, según ha dicho, girará en torno a la planificación, a la adaptación de la producción del vino a los nuevos gustos del mercado, mejorando la internacionalización de las empresas y promoviendo la creación de estructuras de comercialización en los mercados internacionales.

En este sentido, el presidente de la Junta hizo hincapié en la importancia de mejorar la eficiencia de los sistemas de riego en Castilla-La Mancha, asegurando que el objetivo del Gobierno es reducir del 85 al 70 por ciento el consumo de agua para regadío en 2015, sin que por ello se vea mermada la rentabilidad de las explotaciones, aprovechando el agua reutilizada y estableciendo pozos comunitarios.

"El agua es estratégica para Castilla-La Mancha", ha señalado Barreda, afirmando que el Gobierno presentará las alegaciones que considere oportunas en la revisión de los planes de cuenca que afectan a la comunidad autónoma. Asimismo, ha resaltado los cambios en las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura, porque "cada vez que se quiera trasferir agua se tendrá que justificar, así como el uso que se le vaya a dar" a este agua trasvasada.

En este sentido, ha manifestado que "representa una buena noticia" el nombramiento de la nueva presidenta de la Confederación Hidrográfica del Tajo, Mercedes Gómez", puesto que, a su juicio, "se trata de una persona que eonoce la problemática y las necesidades de Castilla-La Mancha", lo que, según dijo, "va a facilitar mucho la interlocución". INFRAESTRUCTURAS

En materia de infraestructuras, el presidente de la Junta ha defendido la inversión de las comunicaciones para mejorar el desarrollo de la región. Por ello, ha explicado, se ha creado por ley la empresa pública de Gestión de Infraestructuras Aeroportuarias a través de la cual se va a canalizar todo el apoyo necesario para favorecer la consolidación de grandes proyectos de comunicación.

Asimismo, ha asegurado que el Gobierno de la región, en colaboración con el Gobierno de España, dará un "gran impulso" al transporte de mercancías, apuntando la necesidad de aprovechando los 1.236 kilómetros de línea de ferrocarril convencional de los que dispone Castilla-La Mancha, así como a las autovías de la región, recordando que en esta legislatura se pondrán en funcionamiento 302 kilómetros de autovía nuevos.