El joven que retuvo desde la noche del martes hasta la madrugada del miércoles a dos mujeres en un piso en la población de Milladoiro, en el municipio coruñés de Ames, Pablo Noel O.M., de 30 años, ha quedado en libertad con cargos tras pasar por segunda vez este jueves por el juzgado de Santiago.

Según han informado a Europa Press fuentes de la investigación, la jueza encargada de la instrucción ha dictado orden de alejamiento de Pablo Noel O.M. de la mujer a la que retuvo junto a su pareja.

Además, las mismas fuentes apuntaron que el joven deberá comparecer de manera regular en el juzgado, al estar imputado por los cargos de detención ilegal y atentado contra agentes de la autoridad.

Pablo Noel O.M. pasó de nuevo en la tarde del jueves por los juzgados compostelanos tras permanecer bajo custodia de la Guardia Civil después de haber prestado declaración judicial por la mañana.

Minutos antes de las 12.00 horas el detenido, que permanecía en dependencias del instituto armado, fue llevado al juzgado de guardia de la capital gallega, que abandonó unas dos horas después para regresar a dependencias de la Benemérita, desde donde fue llevado de nuevo a dependencias judiciales en la tarde del jueves. CUCHILLOS

En la jornada del miércoles agentes del instituto armado se habían incautado de tres cuchillos durante el registro del domicilio en Milladoiro en el que el individuo retuvo durante varias horas a su compañera sentimental y otra mujer.

Pablo Noel O.M., de nacionalidad dominicana, retuvo durante varias horas a su pareja sentimental y a otra mujer, por lo que está acusado de un delito de detención ilegal y de otro de atentado contra agentes de la autoridad, ya que intentó agredir a un efectivo del dispositivo.

Sobre las 19.50 horas del martes la Guardia Civil recibió una llamada derivada del 112 en la que se alertaba de que un varón con un cuchillo en la mano tenía retenida a su compañera sentimental junto a otra mujer.

La compañera sentimental del individuo logró, tras varias horas retenida en la vivienda, huir por el balcón y refugiarse en casa de un vecino, mientras que la otra mujer permaneció en el piso, hasta que el hombre abrió la puerta y accedieron los agentes.

El joven, que supuestamente estaba bajo los efectos de las drogas, había atacado antes de ser detenido con un cuchillo de grandes dimensiones a un agente que se encontraba en el rellano de la vivienda tratando de convencerle para que pusiera fin a su encierro y dejara marchar a las mujeres, pero que no resultó herido.