La delicada situación económica ha obligado al Ayuntamiento de Valencia a recortar los gastos al máximo, pero también a aumentar los ingresos en la medida de lo posible. Entre ellos, las entradas en concepto de multas de tráfico no podían ser una excepción.

Así lo reflejan los presupuestos de este año 2010, cuando por primera vez en los últimos tres años, ésta partida se ha incrementado en 500.000 euros hasta alcanzar los 8 millones de euros.

En este sentido, la Policía Local se ha puesto manos a la obra y en sólo estos primeros seis meses que llevamos de año ya casi han doblado lo presupuestado a base de multas.

En total, han puesto 14,7 millones de euros en sanciones por infracciones como aparcar en doble fila, en el carril bus o por superar los límites de velocidad, por citar algunos ejemplos. Sin embargo, hasta ahora el Consistorio sólo ha recaudado 2,8 millones.

En este sentido, el concejal del PSPV Juan Ferrer ha asegurado que «el Ayuntamiento no suele recaudar más del 30% de las multas que pone, porque la gente las recurre para alargar el proceso». Para Ferrer, «esta situación está provocada por la política de multas que realiza el equipo de gobierno del PP. En lugar de poner tantas multas, tendrían que poner menos y cobrar todas porque si ponen multas y luego no se cobran, pierden su carácter disuasorio y la gente no corrige la conducta».

38 millones en 2009

El año pasado fue uno de los que más dinero en multas de tráfico registró el Ayuntamiento, hasta el punto que quintuplicó lo presupuestado. Los agentes pusieron en total 38,7 millones de euros en sanciones, cuando lo previsto en las cuentas municipales eran unos ingresos de 7,5 millones de euros. Aún así, del montante total se ingresaron 8,3 millones.

El resto de sanciones siguen su curso y en el caso de que el denunciado no pague, agotado todo el proceso administrativo, se le acabará embargando.

Récord absoluto en 2008

Casualmente, han sido los años de la crisis los que más dinero en multas se le ha sacado a los valencianos. En concreto, el Ayuntamiento logró su récord es 2008 cuando los ciudadanos fueron literalmente fritos a multas con un total de 39,2 millones de euros puestos en sanciones. Por detrás está 2009 con 38,7 millones. En ambos casos, lo presupuestado era 7,5 millones.